El budismo es una filosofía que llama a muchas personas, pero existe tanta información y fuentes diferentes, que es difícil saber por dónde comenzar.
A diferencia de otras filosofías y religiones, al budismo no le interesa reclutar más miembros. No existe un “Vaticano” budista, no hay una autoridad máxima y tampoco existe un camino claro qué seguir. Uno tiene que comenzar a investigar por su parte, dejando toda la responsabilidad en nuestras manos.
Por otro lado, tampoco existe una manera rápida de ser budista. Es un proceso que puede tardar años, así que la paciencia es una de las herramientas más útiles.
Esto podría abrumar a muchos, así que preparé una pequeña lista de pasos a seguir para quien se interese en adoptar las enseñanzas del Buda.
Para comenzar en budismo
1. Entiende que será lento
Saber esperar y vivir un día a la vez es básico. En budismo no existe una iglesia donde por medio de un ritual mágico nos conviertan en practicantes. Llegar a ser budista será un camino largo, pero lleno de crecimiento.
Aquí no hay prisas, no hay límites de tiempo ni urgencias. Sólo disfruta el viaje y nunca te obsesiones.
2. Lee. Mucho
El budismo es una filosofía apoyada 100% en conocimiento; mismo que sólo llega por medio de la lectura. Seguro, puedes ser una persona muy observadora y sacar conclusiones maravillosas; pero si no lees, no tendrás marco de referencia alguno.
El primer paso en la ruta hacia el budismo comienza cuando terminas tu primer libro. Y el segundo paso es cuando terminas el segundo libro.
Y por “libro” me refiero a esas pilas de hojas con letras y sin ilustraciones que ya nadie toca ni por error.
Mientras lees libros, lee foros y blogs. También puedes escuchar podcasts.
Nunca pares de leer.
Cuando estés cansado de leer, lee un poco más.
Budismo para Dummies es un buen libro para comenzar.
3. Medita
Budismo = meditación. No hay salida. Si quieres ser budista, tienes que pasar meditando el triple de tiempo que pasas leyendo.
El conocimiento entra con la lectura, pero necesitas dar espacio y silencio a la mente para que asimile lo que vas aprendiendo.
Por otro lado, la ciencia ha demostrado infinitos beneficios resultantes de meditar con disciplina. En realidad hay mucho qué ganar y nada qué perder.
¿No sabes cómo comenzar? ¡Bienvenido!
4. Aplica lo aprendido
El budismo nos abre la puerta a códigos de conducta éticos y a la tranquilidad interna.
Aplica lo aprendido a tu vida cotidiana, lo mejor que puedas.
Sin duda te toparás con muchas preguntas y dudas. Te darás contra la pared más de una vez y tus valores familiares/personales/religiosos se cimbrarán.
Cuando estés en este punto, será tiempo de buscar un grupo.
5. Encuentra un grupo
Es posible ser practicante solitario, pero formar parte de una sangha (comunidad budista) es muy agradable. Siempre encontrarás talleres, festivales, buena comida y lo mejor: excelentes amigos.
Sin embargo, unirse a un grupo por primera vez puede ser una experiencia dura. Se hablará de temas que no entiendes, habrán códigos de conducta que no conoces y dirán palabras que jamás has escuchado. En suma, te sentirás fuera de lugar.
Por esto, recomiendo mucho que se busque una comunidad hasta después de haber leído dos libros de budismo básico.
¿Qué comunidad budista elegir? Asiste varias veces a diferentes sanghas hasta que te sientas cómodo en alguna. Es cuestión de experimentar.
Y quizá aquí es donde encontrarás a algún maestro que será tu guía. Pero eso no lo sabrás hasta que llegue el momento.
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Cada camino es diferente, así que esta lista es sólo una colección de sugerencias. ¿Tienes algún punto qué compartir? ¡Para eso están los comentarios!