Eso que tan bien plasmó Joseph Heller:
He llegado por fin a lo que quería ser de mayor: un niño
En verdad no sólo pasa de niño. Siempre andamos queriendo acelerar las cosas, creyéndonos que hay una meta que debemos de alcanzar, cuando si uno lo piensa bien creo que es más importante saber disfrutar del camino.
El problema viene de que siempre estamos intentando perseguir una falsa idea de seguridad y bienestar. Siempre queriendo tenerlo todo bajo control, pero mucho me temo que tanta seguridad y bienestar como se tienen de niño es difícil de volver a alcanzar.
No seamos cómplices de ese sin sentido de querer avanzar rápidamente, de estar siempre adelantando acontecimientos. La infancia, como todo en la vida, pasa, ni tu ni nadie lo puede evitar, pero no queramos acabar con ella antes de empezar.
Dejémosle que sueñe sin que sus sueños lastimen ni su ingenuidad ni su inocencia. Admitamos que un poco de sana malicia no hace daño a nadie y guardemos como oro en paño esa mirada sincera, esa inquietud pura por saber y conocer.
Supongo que merece la pena intentarlo, supongo que esa será siempre la mejor manera de saber como motivar a un niño.
A mí también me gustaría volver a ser un niño,
Y tú, ¿qué quieres ser de mayor?