Mejorar el rendimiento de la memoria puede ser algo complicado, especialmente cuando necesitas recordar algo
1. Centra tu atención en el material que quieres recordar. La atención es uno de los aspectos clave de la memoria. Para ayudar a que la información trascienda de la memoria a corto plazo a la de largo plazo, necesitas concentrarte en dicha información. Repítela cuando sea necesario y priorízala evitando distracciones.
2. Utiliza reglas mnemotécnicas. Las mejores reglas mnemotécnicas son aquéllas que te ayudan a encontrar significado a la información que estás tratando de traer a la memoria, para mejorar tu capacidad de recordar. Elige alguna que te resulte atractiva, que sea positiva, que se salga fuera de lo normal, y utiliza para ello el sentido del humor.
3. Visualiza. La visualización ayuda mucho a mejorar el proceso de la memoria debido a que es más fácil para el cerebro procesar imágenes que fragmentos y más fragmentos de texto. Enfócate en fotografías, gráficos, ilustraciones y otros diagramas que encuentres en la materia que estás tratando de estudiar, o mejor aún, créalas tú mismo. Haz también esquemas visuales, tablas, remarca, cualquier cosa que te pueda dar una pista visual.
4. Enséñaselo a alguien. Los estudios demuestran que leer un material en alto mejora la retentiva, de forma que agarra a tu compañero de estudios y enséñale qué es lo que realmente has aprendido. Hacerlo así mejorará tu memoria, recordarás mejor y también aumentarás tu confianza mientras se aproxima la hora del examen.
5. Modifica tu rutina. Introduce cambios en tu esquema de trabajo habitual previo a los exámenes. Eso mejorará el rendimiento real de tu memoria. Cambia el lugar o la hora de estudio, para aumentar tu capacidad de esfuerzo. Todo ello aumentará sustancialmente tu capacidad de recordar a largo plazo.
Cinco minutos es un gran periodo de tiempo para poner en tu memoria ejercicios de entrenamiento que a buen seguro harán maravillas con el rendimiento de tu memoria como nunca antes has visto.
Daniel Rojas