1. Hobby: Encuentra tiempo para disfrutar de tu hobby, no busques excusas, si estás trabajando puedes disfrutar de las tardes. Si estás de vacaciones lo tienes aún más fácil. Recuerda: el verdadero “flow” está en tu pasión.
2. Haz algo nuevo: ¡Cambia la rutina del día a día! No te limites, abre tu mente y haz algo en lo que siempre has pensado pero a lo mejor no has tenido tiempo. Si no puedes viajar quizás puedes probar algún restaurante nuevo, o conocer a gente nueva. ¡Atrévete!
3. El poder de la música: recuerdo que mi profesora de musicoterapia nos recomendaba preparar un botiquín musical. Fue un consejo muy bueno que recomiendo a mis clientes. Busca música que te cargue con energía positiva, que te haga mover el cuerpo, que te despierta y llena de vida. Prepara tu propia lista y póntela cuando veas que necesitas recargarte.
4. ¡Respira! Toma la conciencia de tu respiración. Para un momento y llénate de vida y energía con la respiración profunda. No pienses en nada en concreto, simplemente concéntrate en el aire que sale y entra.
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