Hoy toca un "micro-post"
Estaréis ya cansados de ver muebles a los que les cambio el color y estilo solamente pintándolos de blanco, pero me he propuesto que en mi "Guía para tunear tu casa y no morir en el intento" veáis todos los avances en el piso, y no podía pasar por alto el pequeño adelanto en el comedor.
Si recordáis solamente cambiando el sofá ya hubo un cambio notorio en él, quedando así:Y como siempre en este blog hay un pero.La mesa de centro!!!Verdad que desentona? Ni locos íbamos a comprar una teniendo esta tan útil y en buen estado.
Quizás su desagradecida madera de pino y su oscuro color no eran lo mejor para el comedor, pero su tamaño y forma me gustaba.
Entre tú y yo, los muebles blancos disimulan el polvo que da gusto, y la bandeja inferior de esta mesa caaaaaaada día estaba llena... solución???Una vez más empezamos con una suave lijada. INSISTO: Si lo que quieres es pintar un mueble no hace falta que lijes hasta que se vea la madera "pura", con una pasada para matar el brillo del anterior barniz basta y sobra. Del resto se encargará la imprimación.
Después de lijar es muy importante limpiar a conciencia toda la pieza. Yo utilizo una brocha limpia para rincones y recovecos.Después con algún producto limpiador lo dejo reluciente (suelo utilizar amoniaco o algún producto con alcohol).
Tras la pasadita de lija a la imprimación le dí 2 capas de esmalte blanco satinado y dejé secar. En menos de 1 hora ya estaba tan seca que se podía pasar al último paso.
Y como siempre digo ese paso es mi favorito: lijar y desgastar!!!Ahí es donde uno se divierte dando años a golpe de lija.
Y aquí la foto finish, donde ya se ve la mesa integrada en el comedor.