No son pocos los esfuerzos que la Unión Europea ha empleado para poder otorgarle a cada ciudadano el derecho fundamental de la salud. Es de estos esfuerzos que han surgido ideas tan ingeniosas como la Tarjeta Sanitaria Europea. Esta herramienta ha permitido la cobertura sanitaria de los ciudadanos europeos, sin importar que no se encuentren en su territorio de residencia.
Dicha tarjeta se encuentra en vigencia desde el año 2004. Ha sido elogiada por los beneficios que se le han ido agregando a ella desde entonces. ¿No tienes ni idea de lo que es ni mucho menos para qué sirve o cómo obtenerla? No te preocupes. A continuación, te explicaremos todo lo que debes saber acerca de este recurso tan valioso y sobre qué puedes hacer para solicitarla.
¿Qué es la tarjeta sanitaria europea?
La Tarjeta Sanitaria Europea (TSE) se caracteriza por ser un documento personal, gratuito e intransferible. El mismo ha sido ideado para acreditar a quien la obtiene el derecho imprescindible de recibir las prestaciones sanitarias que puedan ser necesarias, desde el punto de vista médico, durante su estancia de forma temporal en el territorio perteneciente al Espacio Económico Europeo o Suiza.
Los beneficios que ofrecen esta tarjeta variarán según las características de las prestaciones y de la duración prevista de la estancia. Así mismo, estarán sujetos estos beneficios al acuerdo preexistente con la legislación del país en cuestión. En este sentido, no se tiene en cuenta el motivo de dicha estancia, ya sea por turismo, una actividad profesional o los estudios.
¿Hacia quiénes va dirigida?
Se deben cumplir ciertos requisitos para poder optar a todos los beneficios que esta tarjeta ofrece. Es importante que la persona esté cubierta por un sistema de seguridad social estatal en cualquiera de los Estados miembros de la Unión Europea. En esta normativa se incluyen los territorios de Islandia, de Liechtenstein, de Noruega y Suiza.
Es por ello que cada miembro de la familia que viaje con frecuencia debería poseer su propia tarjeta. De esta manera se encontrará protegido ante cualquier acontecimiento indeseado.
Pero no solo es válida para ciudadanos europeos. Aquellas personas no europeas que posean una residencia en la Unión Europea, también tienen derecho a una tarjeta de esta naturaleza. Y en este mismo caso, también es indispensable que se hallen cubiertos por un régimen de seguridad social estatal.
Sin embargo, los nacionales de países que no pertenezcan a la Unión Europea, lamentablemente no podrán utilizar su Tarjeta Sanitaria Europea en regiones como Dinamarca, Islandia, Liechtenstein, Noruega o Suiza.
¿Cómo se obtiene la tarjeta sanitaria europea?
Para poder obtener la Tarjeta Sanitaria Europea, deberás tener un Certificado Digital, un DNI electrónico, Cl@ve Permanente o CL@ve PIN. También podrán realizar dicha gestión mediante la App Móvil MUFACE.
El periodo de entrega de la Tarjeta Sanitaria Europea es bastante variable. No existe un tiempo estipulado para su emisión y envío por parte de la Fábrica Nacional de Moneda y Timbre. Por ello, si estás por planificar un viaje, debes solicitarla con antelación suficiente.
En caso de que se acerque tu fecha de embarque y la tarjeta aún no ha llegado a tus manos, aún así, puedes solicitar un certificado provisional a través de la sede electrónica.
Los medios a través de los cuales puedes solicitar tu tarjeta y los pasos a seguir, se explican a continuación.
Sede electrónica
Tanto los titulares como los beneficiarios de la asistencia sanitaria, poseen la opción de solicitar o renovar su tarjeta. Para ello, deberás identificarte a través de un certificado electrónico, cl@ve o vía sms
En cuanto al acceso vía sms, no necesitarás de otro método de identificación previa. Sin embargo, deberás hacer constar en la base de datos de la Seguridad Social tu teléfono móvil. De este modo, podrás identificarse gracias a la contraseña de un solo uso. La misma te será otorgada directamente a tu teléfono móvil vía sms.
Ten en cuenta que, antes de todo esto, se te solicitarán algunos datos personales. Deberás indicar tu nombre, apellidos, número de teléfono, documento de identidad, fecha de nacimiento y poco más.
Además, podrás registrar tu teléfono móvil en la Seguridad Social con la ayuda del servicio de solicitudes que puedes encontrar en el portal web de la TGSS.
Portal Tu Seguridad Social
Otro método efectivo para poder realizar la solicitud de la Tarjeta Sanitaria Europea es a través de Tu Seguridad Social. El proceso podrá llevarse a cabo a través de un nombre propio o mediante un representante. También es posible con un apoderado, siempre y cuando se esté registrado en el registro electrónico de apoderamientos.
Para proceder a la solicitud, tan solo deberás seleccionar este método de acceso al portal, ubicar y seleccionar el trámite oportuno. Seguidamente, se debe cumplir con las indicaciones que se nos presenten.
Como dato extra, es posible identificarse y acceder a este trámite a través de las mismas vías que mencionamos en la Sede Electrónica: cl@ve, certificado digital o vía sms.
Una vez que hayas podido identificarte, deberás seleccionar la opción Solicitar Tarjeta, la cual podrás hallar en el apartado Tarjeta Sanitaria Europea. Mediante esta vía, podrás seleccionar el domicilio al cual deseas que te envíen este documento.
¿Qué hacer si me niegan la solicitud?
Hay que tener en cuenta que si se ha solicitado la Tarjeta Sanitaria Europea, la autoridad local se encuentra en la obligación de proporcionar una. En caso contrario, deberá ofrecerte un certificado de sustitución provisional. Esto solo será proporcionado cuando por razones de fuerza mayor, la tarjeta no se encuentre disponible de forma inmediata. Si esto no se cumple, estás en todo tu derecho de interponer una apelación.
Aspectos a tener en consideración
Este servicio de atención sanitaria tendrá en cuenta los tratamientos médicos que cada persona requiera y la duración de la estancia planeada. Sin embargo, se rige según la legislación de cada país.
La Tarjeta Sanitaria Europea (TSE) no ejerce su efecto cuando el desplazamiento entre las comunidades tenga la finalidad exclusiva de recibir tratamiento médico. En estos casos, será necesaria la intervención del Instituto Nacional de la Seguridad Social (INSS), o el Instituto Social de la Marina (ISM). Estos organismos deberán emitir un formulario correspondiente con previo informe favorable del Servicio de Salud.
Por otro lado, este documento tampoco es válido en caso de que traslades tu residencia al territorio de otro Estado miembro
En ciertos casos muy concretos, deberás asumir una cantidad fija de dinero o un porcentaje determinado de los gastos adjudicados a la asistencia sanitaria que recibas, en igualdad de condiciones con los asegurados del Estado al que te desplazas. Ten en cuenta que estos importes no serán reintegrados.