Gemelo: pasador formado por dos piezas unidas por un pequeño vástago o por una cadenita, que se usa para cerrar el puño de la camisa.
Los gemelos están diseñados solo para usarse con camisas con ojales a ambos lados, y que por tanto no llevan botones. Estos puños pueden ser sencillos o dobles, pudiéndose llevar ya sean “besándose” (enfrentados) o solapándose uno con el otro. Sin embargo, se suelen preferir los puños “besándose”.
Una pieza de joyería eminentemente masculina, pero que las mujeres hemos adoptado en los últimos años, y que según la National Cuffling Society ya se encontraron evidencias de su uso en jeroglíficos antiguos en la tumba de rey Tut. No obstante, los gemelos tal y como los conocemos hoy en día fueron usados por primera vez durante el siglo XVIII.
No fue hasta mediados de este siglo con la invención de la máquina de estampación a vapor, la electro-metalurgia y la máquina de torneado a Guilloché, que se pudieron fabricar gemelos un poco menos artesanales, ya que hasta ese momento todo el proceso se hacía manualmente.
A medidos del S.XIX se popularizó su uso al ponerse de moda lo que conocemos ahora como el puño francés o camisa de doble puño -moda que se ha mantenido desde entonces- y por la que siguen siendo tan populares este tipo de joyas masculinas. Es esta época se popularizó mucho la costumbre de guardar un pequeño mechón de pelo, de un amor perdido, debajo del cristal del gemelo de un hombre como signo de pena y de nostalgia.
Durante 1880 en América, George Krementz patentó un dispositivo basado en una máquina de fabricación de vainas para la guerra civil, que podía producir en masa botones y gemelos. De repente, todos los negocios estadounidenses estaban encargando gemelos para publicidad o como regalos para incentivar a sus clientes
Ya en el siglo XX se popularizaron los gemelos de esmalte. Los artesanos de la casa Fabergé, que con la revolución comunista se vieron forzados a emigrar de su país, viajaron hasta América y Europa popularizando el uso de este tipo de técnica en la fabricación de joyas para hombre.
Si os interesa la historia de los gemelos y su evolución a lo largo del tiempo, no podéis dejar de visitar el Cufflink Museum (Museo del Gemelo) en Conway, New Hampshire, que exhibe orgulloso más de 70.000 pares. No he sido capaz de encontrar el link a su página Web, no sé si es que no tienen o se encuentra registrada por otro nombre, pero me quedo con ello pendiente y si la localizo la incluiré aquí más adelante.
Una de las colecciones más completas y exclusivas de las que he podido tener referencia, ha sido la de la familia real inglesa. Tres generaciones de reyes en una colección de gemelos. La colección incluye gemelos que cubren los reinados de Eduardo VII y sus sucesores, Jorge V y Eduardo VIII, y sigue siendo ampliada por el actual Príncipe de Gales.
Son un regalo elegante, discreto y duradero. Un recuerdo para toda la vida. Una joya que pasa de padres a hijos y que perdura en las familias, más allá del tiempo.