Hace unos días, nuestra amiga Auxi nos hizo un presente. El motivo, había iniciado una andadura en el comercio local itinerante con productos tanto artesanales como de loza. Nos pidió consejo sobre cuál de los mercadillos de nuestra ciudad tenía más tirón y cuál había sido nuestra experiencia en ellos. Fuimos sinceras... En esta nuestra tierra priva más la venta ambulante de ropa que la que se refiere a decoración, algo que a nosotras (que somos de "buen" vestir, no creáis) nos espanta. El caso es que, como empezó con pocos artículos en su primera venta, por eso del "vamos a ver qué ocurre", nos pidió algunos de nuestros productos, los más pequeñitos, para rellenar su quiosco. Poco a poco, y ya sin nuestra aportación, Auxi empezó a vender cada día más y, por sorpresa, nos trajo esta preciosa taza (sabe que nos encanta el té) gatuna, que no dudamos en estrenar al momento. Perico parecía estar celoso de que otro congénere ocupara su espacio, pero ya se han hecho amigos. Y es que estos recipientes tan animados se han propuesto habitar en nuestros hogares con muchísimo estilo, ¡sí señor! Foto Foto Foto Foto Y vuestro menaje, ¿está copado por animales?