Pues aquí de nuevo para contar mi pequeña aventurita del concierto de Thirty seconds to Mars en el Palacio de Vistalegre.
Antes de nada quiero no disculparme, pero si poner sobre aviso a los fans del grupo. Lo que voy a escribir probablemente no sea de vuestro agrado. Haters gonna hate, so...
Hará unos meses el hermano de mi compi de piso nos dijo que si nos animábamos a ir al concierto de Thirty seconds to Mars. Yo algo había escuchado, no estaban en mi biblioteca musical pero si los había visto en la MTV. Los vídeos son difíciles de olvidar por lo currados que están. Así como en el fondo me apunto a un bombardeo pues me compré la entrada.
Ayer era el día, y para el concierto mi casa se convirtió en un albergue. Pero como entre las clases y demás casi no piso el piso pues justo llegué con las cosas de clase para marchar y ver a los ocupas provisionales. Hasta me olvidé de cambiarme de ropa. Con camisita y todo que me fui al concierto. Una vez allí me dí cuenta de que desentonaba un poco...
He estado ya en varios conciertos, no es que hayan sido muchos. Pero ya varios. Y nunca me he sentido tan incómodo. Ni en el FIB. Cuando por la noche aparecí en el piso de un amigo, lo primero que me dijeron los que allí estaban: ¿Dónde te has metido que traes esos olores? La bendita humanidad concentrada..
Es lo que tienen este tipo de conciertos y al público al que van dirigidos. Me sentía también viejuno...
En cuanto a la música que allí había:
Los teloneros eran More than a thousand, aquí una muestra de su música:
El ataque de risa que nos dio a mi compi de piso y mí fue de aupa. En serio. No me gustaron nada. Su directo se basaba en repetir jump, jump y jump. Nunca había vivido algo similar. Sip, el tío le ponía ganas en cuanto a conectar con el público pero en mi opinión se olvidaban de la música en el proceso. Preguntó el cantante que si queríamos rock and roll, yo aún lo estoy esperando. Pero de verdad que el tío le ponía ganas. Un diez a eso.
Por fin tras un buen rato por allí empezó el show principal, Thirty seconds to Mars:
En cuanto al show que se tienen montado, es genial. Hacen participe del espectáculo a los que allí estábamos haciéndonos protagonistas en todo momento. Yo iba con todas las canciones escuchadas, pero cuando comenzó aquello yo no me metí en el concierto, en la propia música. Demasiado jump, jump(creo que nunca había escuchado en toda mi vida esa palabra tantas veces) y poca música. Y no me gusta que me insulten, lo siento. Pero los modales se los dejó en casita. La única canción que me gustó fue la de Bad romance, que para colmo no es suya. Y hubo dos cosas que no me gustaron ni un pelo. Poner la batería fuera del centro, tenia que ir donde el símbolo ese. Ese es su lugar. Lo siento. Y la otra es que se quedase el solo cantando. Es un grupo, no un cantante que tiene a su servicio a unos secuaces. Aunque ya últimamente son pocos los grupos, y más los cantantes que están rodeados. Me parece un detalle feo que se marchen del escenario. Lo de las bolas rojas molo, fue divertido. Y como conecta con la gente, aunque sea un pelota al ponerse la camiseta de España y preguntarnos que se siente al ser los campeones del mundo. Pero como mueve a la gente es acojonante. Un diez a eso. Para terminar decir que voy a poner dos notas, la mía personal y otra para los fans. No por tenerlos contentos, más bien porque a mi no es que me guste este tipo de grupos y eso condiciona lo que disfrute del concierto. Y a los fans que están habitando mi piso les más molo.
Mi nota: 5/10Nota para fans:9/10
-Hubo momentos de autenticas mofas...-