Según el instituto, se trata de una mascarilla reutilizable de alta eficiencia que contaba ya con el certificado de protección microbiana, propiedad a la que se suma ahora la capacidad del tejido para “desarmar” el virus SARS-CoV-2, el patógeno que causa la Covid-19. En un comunicado, el Instituto informa de que está desarrollado con un tejido técnico que integra varias capas distintas e impermeables. Los test realizados por el iMM confirman su eficacia para proteger contra esta enfermedad.
“La mascarilla cuenta con un innovador revestimiento que neutraliza el virus SARS-CoV-2 cuando entra en contacto con el tejido, un efecto que se mantiene tras someter al tejido a 50 lavados”. Pedro Simas, virólogo del iMM, ha coordinado las pruebas que evalúan las propiedades antivirales del tejido y afirma que “de una forma simplificada, estas pruebas consisten en el análisis del tejido tras su contacto con una solución que contiene una determinada cantidad de virus, midiendo su viabilidad a lo largo del tiempo.