"El tabaquismo representa la primera causa de enfermedad y muerte prematura en el mundo industrializado y las autoridades sanitarias y gobiernos cada día tienen más datos y evidencias que les permiten poner en práctica medidas que impidan que esto suceda. Sin embargo, a la hora de implementar las medidas que se han demostrado eficaces científicamente para disminuir la prevalencia de consumo de tabaco en la sociedad, nos encontramos con numerosas y variadas dificultades que ralentizan los avances". Así se ha manifestado María Ángeles Planchuelo, presidenta del Comité Nacional para la Prevención del Tabaquismo (CNPT), durante la mesa debate sobre la importancia del tabaquismo en la agenda de los políticos, celebrada en el marco del VI Congreso Nacional de Periodismo Sanitario, que se desarrolla en Oviedo.
"Podemos decir que los avances que en los últimos tiempos se han producido en España en la prevención y tratamiento del tabaquismo han sido interesantes, pero aún distan mucho del nivel al que tenemos que aspirar y debemos conseguir", ha asegurado Mª Angeles Planchuelo.
Por su parte, Gaspar Llamazares, presidente de la Comisión de Sanidad del Congreso de los Diputados, ha expresado su satisfacción por cómo se está tramitando la modificación de la Ley que previsiblemente será aprobada finalmente el 2 de enero de 2011. Según ha explicado, el próximo martes se celebrará una ponencia que evaluará los trabajos de enmiendas transaccionales y los informes que sean aprobados serán votados el miércoles en la Comisión. "Esperamos que la mayoría de enmiendas presentadas por Izquierda Unida sean tomadas en consideración, ya que nuestra intención es acotar de forma clara el consumo de tabaco y evitar que la comunidades autónomas no puedan saltarse la normativa estatal por intereses partidistas".
Santiago Cervera, portavoz adjunto del Grupo Popular en el Congreso, ha defendido en un video emitido durante la mesa debate la tramitación de esta ley como una solución a un problema de primer orden "que la sociedad no ha podido resolver por sí misma", que garantiza los derechos de libertad de los no fumadores y también ayuda a los fumadores que desean dejar el hábito. "La ley en sí misma desdice a los que desautorizan su aprobación por limitar las libertades, ya que precisamente lo que pretende es ampliar los derechos de todos los ciudadanos".
En opinión de Cervera, la reforma de la norma se hace indispensable, ya que "la anterior era incompleta por no incluir todas las consideraciones, por regular mal las restricciones en el sector de la hostelería y por carecer del coraje suficiente para hacerse cumplir". No obstante, desde su grupo parlamentario recomiendan incluir una evaluación de coste-beneficio de la norma y reclaman al Ministerio de Sanidad la elaboración de análisis periódicos en colaboración con las comunidades autónomas para su seguimiento.
--Los expertos coinciden en señalar que la nueva Ley ofrece la oportunidad de avanzar en estrategias esenciales de lucha contra el tabaquismo como, por ejemplo, la reformulación de la política fiscal con el fin de disminuir y evitar el inicio al consumo del tabaco entre los más jóvenes, así como la inclusión de medidas de deshabituación tabáquica, facilitando la asistencia dentro del Sistema Nacional de Salud a todos los fumadores que deseen dejar de fumar, pero priorizando los grupos más vulnerables como pacientes con enfermedades crónicas, pacientes psiquiátricos institucionalizados, población penitenciaria y población de bajos recursos económicos.