Controlar el estrés ayuda a combatir la reaparición de eventos cardiacos

Por Fat
Investigadores de la Universidad de Uppsala, en Suecia, aseguran que reducir el estrés diario puede ser una medida clave para combatir la reaparición de eventos cardiovasculares, según se desprende de los resultados de un estudio publicado en la revista Archives of Internal Medicine.Según estos autores, las terapias cognitivo-conductuales pueden reducir hasta en un 41 por ciento la reaparición de trastornos cardiovasculares, un dato que ha propiciado que la Sociedad Europea de Cardiología (ESC, en sus siglas en inglés) recomiende programas de manejo del estrés para enfermos coronarios.
En el estudio participaron un total de 362 hombres y mujeres que habían recibido el alta hospitalaria tras haber sido ingresados por una enfermedad coronaria. Durante este ingreso, todos los pacientes recibieron la asistencia habitual en estos casos, que incluye tratamientos para reducir el colesterol y la presión arterial y para prevenir los coágulos sanguíneos, sin necesidad de haber requerido un tratamiento adicional. De estos, a casi la mitad (192) se les incluyó en un programa de terapia cognitiva-conductual, con 20 sesiones de dos horas cada una, en la que se trabajó para reducir el estrés diario, relativizando el tiempo y evitando la hostilidad.
Tras 94 meses de seguimiento, los autores del estudio observaron que los pacientes que participaron en estas terapias presentaron una tasa más baja de eventos cardiacos, mortales o no, al tiempo que también fueron menos recurrentes el número de infartos de miocardio o la mortalidad por cualquier otra causa. Según ha destacado el portavoz de la Sociedad Europea de Cardiología, Joep Perk, este estudio muestra como los programas para el control del estrés son importantes, aunque explica que la participación en estas terapias puede tener un efecto no estudiado en este trabajo: una mayor adherencia al tratamiento al estar más en contacto con los profesionales.Por tanto, los investigadores aseguran que con este estudio se abre el debate de por qué este tipo de terapias ofrece este beneficio adicional a los enfermos coronarios. Según plantean, el estrés puede ser perjudicial para el sistema cardiovascular a través de la activación del sistema de catecolaminas, relacionados con un aumento de los problemas de corazón.