Por detrás, dos combinaciones distintas de telas rojas estampadas cosidas en vertical. Me gusta el resultado, muy country. Y romántico, que llega San Valentín.
¿Y dónde lo pongo, si ya tengo los tiradores de los armarios repletos de corazones y colgantes? Pues en esta cestita de crochet que tenía a medio acabar, ya he aprovechado y la he terminado.
Con este corazón me apunto al Finde Frugal de Marcela, repleto de sorpresas e ideas para San Valentín (y todo momento).