Las cortinas de aire son equipos de ventilación que se encargan de crear una barrera invisible sobre la puerta, de forma vertical o en el suelo, dependiendo el tipo de descarga que esta tenga, cumpliendo su misión de forma eficiente y sin suponer una limitación de acceso tanto para personas como para vehículos.
¿Qué aspectos se deben considerar para elegir una?
Uno de los aspectos fundamentales a considerar, más allá de si se tratará de cortinas de aire frío calor, cortinas industriales o cortinas de aire acondicionado, es la altura que tendrá la instalación, porque hay espacios que quizá dificulten el trabajo. También es necesario tener en cuenta la medida o distancia que existe desde el difusor de descarga hasta el suelo.
La puerta es otro factor fundamental, tanto su anchura, como sus características en cuanto a apertura, ya sea que esté siempre abierta o no, sea de apertura manual o automática, rotativa, etc.
Localización del edificio, principalmente por el clima, así como el tipo de negocio o establecimiento, el estilo, decoración y diseño, serán factores clave para decidir qué cortinas de aire online comprar.
La existencia de varias puertas en el mismo plano, en planos distintos o en oposición, así como la existencia de varias plantas comunicadas interiormente por escaleras mecánicas, también debe ser evaluado antes de adquirir el equipo.
Otro punto a considerar son las características de la instalación de climatización del interior del edificio.
El factor de la recirculación del aire
Las cortinas de aire pueden clasificarse de acuerdo al tipo de recirculación de aire que posean.
De recirculación
Son las cortinas que se ocupan de recoger y retornar la descarga de aire a la entrada de la cortina. Este sería el tipo de cortina más eficiente, pero también el que suele tener un coste más elevado.
Aquí podríamos encontrar tres clases de cortinas diferentes, por un lado, las ambientales, que se caracterizan por descargar el aire mediante ventiladores sin aportar calor al ambiente; las eléctricas, encargadas de hacer que el aire ambiental recircule, pero que en los meses de invierno puede conseguir calentar el aire a través de resistencias eléctricas; finalmente, las que funcionan por agua caliente, que al igual que las anteriores, permiten calentar el aire, pero mediante baterías de agua caliente.
Vale destacar que las últimas dos, es decir, las eléctricas y las que funcionan por agua caliente, pueden ser también utilizadas como alternativa para calefaccionar las estancias, dado que su rendimiento es suficiente para aportar calor en una superficie de entre 500 y 750 m2.