En estos meses de cuarentena en los que se cerraron todo tipo de recintos culturales, artistas de diversas disciplinas han hecho uso de su creatividad para mostrar su trabajo de manera virtual.
Aprovechando las redes sociales y las diferentes plataformas, algunos lo hacen para ganar dinero y otros simplemente por el placer de compartir con el público.
Desde México, el actor, escritor y director Juan Ríos Cantú gestó los proyectos "Primavera entre paredes" y "Poesía en tu sofá", una mezcla de poesía y narraturgia invisible, como él mismo lo califica. Por su lado, el actor y director Víctor Vázquez ha hecho varias transmisiones de teatro en vivo, "Teatro en tu casa", presentando obras como "Poe, el maestro del terror", un espectáculo con relatos basado en obras de H.P. Lovecraft y el monólogo "Que no se culpe a nadie de mi muerte".
Desde Puerto Vallarta, La Gata Café Bar presentó "CabareTacha, sanando desde casa" y va a realizar la lectura dramatizada de "Nosotros somos los culpables", conmemorando los 11 años de la tragedia de la Guardería ABC. También, el actor y director Mario Oliver transmitió la obra "Un hombre" escrita por Miguel Alejandro Reyna, y ambos preparan el estreno de una serie virtual, "Selección Natural". Entre tanto, el dramaturgo y director Ricardo Ruiz Lezama imparte un diplomado en línea. En Calgary, Canadá, se realizó una lectura dramatizada de las obras recientemente escritas por varios dramaturgos mexicanos, "De Pandemia a Pandemorium", la cual fue transmitida por la Casa Mexico Foundation en el Virtual Latin American Art Festival.
Uno de los dramaturgo uruguayos con más proyección internacional, Federico Roca, imparte el Taller de Escritura Creativa, invitando a todos los interesados a adentrarse en la estructura general del microcuento, el relato, el guión dramático y el guion audiovisual.
Auspiciado por el Teatro João Caetano, desde Brasil, la actriz Christiane Tricerri dio tres funciones del monólogo "Frida Kahlo Viva la Vida", dirigido por el genial Caca Rosset, ambos integrantes del mítico Teatro do Ornitorrinco. Posteriormente transmitieron "Ella dice / Él dice", la verdad desnuda y cruda, como ellos mismos lo definieron. Por su parte, el productor, actor, director, escenógrafo, vestuarista e iluminador Kleber Montanheiro imparte un curso en línea sobre escenografía y vestuario para teatro musical.
En otros ámbitos, desde Brasil, la monumental Cida Moreria da conciertos en vivo interpretando canciones como sólo ella sabe hacerlo, con toda la fuerza de esa voz profunda que penetra en el alma. Desde Chile, la Orquesta Barroca Nuevo Mundo, organizó el concierto "Barroco en pandemia" con músicos de siete países, interpretando obras creadas en tiempos de pestes y pandemias, desde el siglo XIV a nuestros días. Desde Cuba, el grupo Buena Fe, conformado por Israel Rojas y Yoel Martínez, dignos herederos de la trova cubana, han transmitido sus conciertos en vivo; el Ministerio de Cultura lanzó el estreno del videoclip " Guaijira", de Daiana García y la Orquesta de Cámara de La Habana, y se llevó a cabo un Mitin Poético Virtual desde La Habana, con más de 40 poetas de 20 naciones.
Aunque muchos discuten si el teatro en línea es teatro o no, en este instante ese debate es estéril: en épocas extraordinarias debemos tomar acciones extraordinarias. Lo importante es que las plataformas digitales sirven para paliar la situación que estamos viviendo.
En este contexto, 223 creadoras y creadores suscribieron un carta para deslindarse de frentes y movimientos que se autodenominan, con exceso de soberbia, como "comunidad artística de México". Esos grupos parecen ignorar que no existe una sola comunidad artística, sino cientos de ellas distribuidas por todo el país y que durante años han sido ignoradas por las instituciones gubernamentales. En su misiva, los creadores dejan en claro que buscan combatir viejas prácticas de corrupción y piden que se deje atrás la visión de producción artística neoliberal, lo cual se dio a lo largo de 30 años del antiguo (Fondo Nacional de Creadores Artísticos), y que esos grupos quisieran mantener para seguir gozando de privilegios. Algunos dicen querer hacer la revolución y encabezar la vanguardia artística... pero, claro, financiados por el gobierno en turno.
Porque mientras muchos artistas hacen uso de toda su creatividad y buscan nuevas formas de expresarse y de ganar dinero, aquellos grupos parece que sólo tienen talento para ver cómo seguir ordeñando al Estado, algo que ha sido su costumbre. Ahora se rasgan las vestiduras por la extinción del Fonca, algo que ellos mismos propiciaron; añoran las épocas donde no hubo transparencia ni democracia, y donde la corrupción y la endogamia fueron males sistémicos. Una de sus ideas es la de un remate o venta simbólica de monumentos del país, pero siendo artistas, ¿acaso no tienen obra propia que ofrecer para obtener ganancias? Otra de sus delirantes propuestas es que la Secretaría de Cultura otorgue a diversos artistas y trabajadores culturales, cien mil apoyos directos a nivel nacional, de quince mil pesos por persona. La cifra final resulta exorbitante y ni siquiera existe un censo oficial de trabajadores de la cultura como para realizar semejante labor titánica. Y mientras estos grupos piden sin dar nada o muy poco, debemos alertar que actualmente existe una verdadera crisis alimentaria en el sureste mexicano, agravada por la Covid-19.
Es por ello que el Fideicomiso para la salud de los niños indígenas de México AC , donde laboran incansablemente Ofelia Medina, Begoña Lecumberri, Fabiola de la Rosa, Eufrosina Rodríguez, Pilar Torre y Luis Reyna, nos invita a que, por medio de un donativo, seamos parte de las acciones que están realizando ante la emergencia alimentaria que padecen las familias desplazadas víctimas de paramilitares, en Acteal, de la Sociedad Civil de las Abejas, Chalchihuitán y en el municipio de Aldama. Se trata de más de tres mil personas que resisten dignamente ante la injusticia. Con nuestros donativos, el Fideicomiso continuará llevando maíz, frijol, arroz, azúcar, sal, jabón y alimento enriquecido a base de amaranto que tanto gusta y que es tan nutritivo. La cuenta es en Scotiabank, número 00107853564. CLABE interbancaria: 044180001078535644. Si requiere un recibo deducible, envíe sus datos al correo [email protected] .
Y así, mientras unos dicen que no viven del aplauso y le mendigan dádivas al gobierno, muchos ciudadanos les aplauden a los heroicos médicos, doctoras, enfermeras, enfermeros y demás especialistas de la salud que se juegan la vida para salvar la vida de otros. ¡Hoy, ellas y ellos, merecen una lluvia de aplausos como agradecimiento a su noble e indispensable labor!