Como enseguida se ponen blandas y se pasan pronto, os aconsejo que hagáis mermelada, ni que sea solo un par de tarros y en invierno lo agradeceréis seguro.
Si no sabéis como hacerla yo os facilito como elaborar la "mermelada de fresas clásica" y "mermelada de fresas con vinagre de Módena", ambas deliciosas.
Bueno, que me disperso, esa receta de hoy es sencilla y una manera más de engalanar unas fresas frescas, aunque de hecho no necesitan nada, pero es para variar.
Ingredientes para 4 personas:
20-25 fresas
75 gr. de chocolate blanco
400cc. de leche
1 huevo
2 cucharadas de azúcar
2 cucharaditas de harina de maíz
25 gr. de mantequilla aprox.
Poner al fuego la leche con el azúcar.
Mientras mezclar el huevo con la harina de maíz, incorporando esta mezcla a la leche cuando empiece a hervir. Remover .
Agregar el chocolate blanco troceado y llevar hasta el punto de ebullición, remover sin parar para que se deshaga el chocolate y que quede una crema fina y ligada.
Fuera del fuego añadir la mantequilla y mezclar bien. Reservar y enfriar.
Lavar, retirar el pedúnculo a las fresas y cortarlas en trozos de bocado. Reservar.
En el momento de llevar a la mesa poner en copas o en plato un fondo de la crema de chocolate blanco y colocar las fresas en medio.
Se puede rallar un poco de chocolate blanco por encima.
NOTA: Yo lo presento en plato de postre hondo, me gusta mucho como queda.
** Se puede tener preparado este postre con anterioridad pero guardando los dos ingredientes por separado en la nevera.
** Se puede hacer con chocolate negro o chocoloate con leche también, o una crema pastelera.
Celíacos: aseguraros bien de que todos los ingredientes sean sin gluten