Queso semi curado
Aceite de oliva / Leche
Cebolla fresca / Sal
Nuez moscada moscada
Elaboración1.- Troceamos todos los ingredientes de las croquetas, las setas (yo las he comprado troceadas), la cebolla fresca y el queso semicurado.
2.- Ponemos a pochar la cebolla fresca.
3.- Cuando la cebolla esté pochada agregamos las setas, las mezclamos bien y esperamos que se hagan.
4.- Las setas ya están listas, ahora nos toca poner el queso.
5.- Después de echar el queso, hacemos un hueco en el centro y allí ponemos la harina, para que se tueste un poquito antes de poner la leche. Lo mezclamos todo bien.
6.- Cuando esté todo bien mezclado, agregamos la leche y la nuez moscada. Rectificamos de sal y lo mezclamos todo bien, cocinamos hasta que la masa esté en su punto.
7.- Ponemos la masa a enfriar y quitamos el aceite sobrante.
8.- Hacemos las croquetas y las pasamos por harina.
9.- Las freímos en abundante aceite de oliva. La temperatura del aceite tiene que ser fuerte.
10.- Las sacamos y las ponemos en papel para eliminar el exceso de aceite. Ya están listas, a comer!!!
A la hora de hacerlas hay que tener cuidado con el aceite, yo no tuve en cuenta que estaba utilizando queso semicurado, y, eso hizo que tuviera que eliminar aceite antes de poner la masa a enfriar. Lo eliminé poniendo sobre la masa papel de cocina.
¿Cuantas croquetas conocéis? Supongo que tantas como ingredientes, ya que se pueden hacer croquetas de todo, dulces, saladas, de morcilla, de arroz, de cebolla, de queso, de carne, de pescado.... Yo pensaba, y estaba equivocada, que la croqueta era una comida de aprovechamiento típica de España, craso error!. Su origen tenemos que buscarlo en el país vecino, en Francia.
Os he contado ya, que de pequeña cuando mi madre hacia croquetas, yo me comía la masa a cucharadas, entraba a la despensa a hurtadillas y me la iba comiendo de a poquito. Evidentemente, mi madre se daba cuenta cuando iba a liarlas y entonces me la liaba, pero a mi, pero me la liaba de 'mentiritas' porque le encantaba que lo hiciera, entre otras cosas, porque como ya os dicho, de pequeña yo era muy mala comedora.
Tuve la suerte de tener una gran madre, también tuve un gran padre, yo siempre digo que eso es cosa de dos, tuve una gran madre, porque tuve un gran padre, y tuve un gran padre, porque tuve una gran madre. Hace mucho tiempo que mis padres no están y, no hace más de 15 días, que una mujer, a la que yo no conocía, me dijo que si yo era la hija de Dominga. Le dije que si, y me estuvo diciendo lo buenas personas que eran mi madre y mi padre. Ciertamente, mis padres fueron excepcionales, grandes personas y grandes padres, adelantados para su época, muy adelantados y con mucho amor siempre para dar.
Hoy es el día de la madre, y dicen que no hay croquetas como las de las madres. Estas croquetas no las hacía mi madre, pero sus croquetas eran las mejores del mundo mundial, porque además de ser una gran cocinera, mi madre fue una persona que derrochaba tanto amor, que no tuvo que estar más tiempo conmigo para darme todo el que necesitaba y para dejarme sobrada de cariño, porque aún hoy lo noto y la siento cerca. Fue tan hábil que me enseñó todo en muy poquito tiempo. Una persona excepcional, una persona llena de amor y cariño, una persona dulce, una persona inteligente, una persona que respetaba todo y a todos, una persona adelantada para su época, que creía en la importancia de hacer las cosas por si mismo, una persona muy dulce, una gran persona, MI MADRE, Dominga Escribano Escribano (yo le decía Escribano al cuadrado), de la que cada día estoy más orgullosa, y a la que intento parecerme, pero me puso el listón tan alto... porque es difícil igualar a una persona iniguanable!.
La música la pone Serrat, 'Soneto a mamá'