Hace un mes, el gigante de las salsas Heinz decidió pedir ayuda a los consumidores estadounidenses sobre a un nuevo producto: el Mayochup, una mezcla de mayonesa y ketchup. Si la encuesta en Twitter recibía más de 500.000 votos a favor, la empresa lanzaría el producto. El origen de esta "innovación" es la mezcla casera que muchos consumidores hacen para conseguir una salsa diferente, y Heinz entendió que podría imitar esa solución doméstica y llevarla al mercado. Algunas de las cuestiones que se plantearon los tuiteros se centraban en si este nuevo producto era realmente una innovación, y también sobre su utilidad: ¿aporta algo el mayochup o está más sabrosa la solución de casa mezclando dos salsas para hacer la tradicional salsa rosa? Más allá de esta disquisición, esta supuesta innovación tiene mucho que ver con el mundo de la salud. Como cuenta Joyce Lee en este artículo de Tincture, la industria farmacéutica copia habitualmente este modelo de innovación pero con una particularidad: incrementa sustancialmente el precio del nuevo producto, sin que exista una aparente mejora de la utilidad (salvo la de pasar de tomar dos medicamentos a tomar uno).
Hace un mes, el gigante de las salsas Heinz decidió pedir ayuda a los consumidores estadounidenses sobre a un nuevo producto: el Mayochup, una mezcla de mayonesa y ketchup. Si la encuesta en Twitter recibía más de 500.000 votos a favor, la empresa lanzaría el producto. El origen de esta "innovación" es la mezcla casera que muchos consumidores hacen para conseguir una salsa diferente, y Heinz entendió que podría imitar esa solución doméstica y llevarla al mercado. Algunas de las cuestiones que se plantearon los tuiteros se centraban en si este nuevo producto era realmente una innovación, y también sobre su utilidad: ¿aporta algo el mayochup o está más sabrosa la solución de casa mezclando dos salsas para hacer la tradicional salsa rosa? Más allá de esta disquisición, esta supuesta innovación tiene mucho que ver con el mundo de la salud. Como cuenta Joyce Lee en este artículo de Tincture, la industria farmacéutica copia habitualmente este modelo de innovación pero con una particularidad: incrementa sustancialmente el precio del nuevo producto, sin que exista una aparente mejora de la utilidad (salvo la de pasar de tomar dos medicamentos a tomar uno).