El dinero en efectivo parece que tiene los días contados. Desde la pandemia, la posibilidad de pagar electrónicamente se está haciendo con la posición del efectivo. Aunque todavía haya muchas personas que prefieran pagar en monedas o billetes. Las razones van desde un mayor control de lo que se gasta hasta una menor trazabilidad, algo contra lo que administración quiere luchar en muchos supuestos.
La mayoría de los límites y controles que se han ido imponiendo al dinero y los pagos en efectivos han estado orientados a limitar, el blanqueo de capitales y los fraudes o malversaciones fiscales. Esto por esto que ciertas operaciones y ciertos pagos no pueden superar unas cantidades máximas estipuladas por la ley, que cada vez son más estrictas.
En España, desde hace casi un par de años (en concreto, desde julio de 2021, con la aprobación de la Ley 11/2021). No se pueden pagar con dinero en efectivo operaciones que superen los 1.000 euros, independientemente de su naturaleza. Es decir, comprar un electrodoméstico que supere ese precio, pagar un servicio de más de 999,99 euros o comprar un coche deberán ser adquisiciones que se completen por transferencia. Ya que tampoco es posible pagar a plazos para tratar de superar este máximo. Eso sí, las transacciones que se lleven a cabo entre particulares si podrán superar hasta los 10.000 euros.
¿Qué cantidad de dinero se puede sacar por el banco en efectivo?
Al igual que existe un límite para pagar con dinero en efectivo, también hay un máximo para retirarlo del banco. En concreto, serán 3.000 euros de tope los que se podrán retirar en billetes de una entidad bancaria sin que la sucursal tenga que avisar a la Agencia Tributaria. Cabe recordar que, por efectivo, se entienden las monedas y los billetes, pero también los cheques al portador pueden ser considerados como tal ya que funcionan de la misma manera. Se considera, entonces, dinero en efectivo cualquier medio concebido para ser utilizado como medio al portador.
Debes tener en cuenta que no cumplir con lo aprobado en esta ley puede conllevar ciertas consecuencias negativas. Para la persona que haya retirado el efectivo o pagado más del límite máximo permitido en efectivo.
En la norma se contempla que quienes no cumplan con estas normativas serán penados con una multa que equivaldrá al 25% del total de la cuantía de la operación realizada. Eso sí, hay descuentos: si la sanción se paga de manera voluntaria y sin alegaciones. Puede reducirse hasta la mitad por pronto pago y sin presentar alegaciones. El límite de plazo difiere de acuerdo con la naturaleza del pago que se haya realizado.