Cubiertas vegetales extensivas en Finestrat

Por Urbanarbolismo

El proyecto que os mostramos hoy trata de unas cubiertas vegetales extensivas que hemos realizado, ubicadas en la localidad de Finestrat.

Este trabajo cuenta en total  con 590 m2 de ajardinamiento dividido en 7 cubiertas, 4 con acabado de césped y 3 con semillado de diferentes especies subarbustivas y de flor. Estas cubiertas se localizan en un complejo de 6 viviendas unifamiliares, en las zonas de piscina y en las terrazas.

Para este trabajo se buscaba un tipo de sistema que fuera de bajo coste y fácil de ejecutar por lo que se optó por desarrollar unas cubiertas de tipo Cántir. Inspirada en el sistema natural de refrigeración de las plantas, la cubierta Cántir utiliza un sistema de riego hidroporoso de tipo aljibe para que la evapotranspiración del jardín optimice la función aislante de la cubierta en invierno y cree un efecto de refrigeración en verano.

La cubierta vegetal Cántir es un sistema ligero y de fácil instalación. Posee una buena capacidad retención de agua ya que combina el sistema de riego,  con la membrana nodular de HDPE (3 litros/m2) y un geotextil 500 g/m2 no tejido de 100% poliéster reciclado, como capa retenedora.

En este proyecto arrancamos desde la capa de impermeabilización, los forjados poseían ya el aislamiento y la posterior formación de pendientes. En este caso se opta por una impermeabilización con lámina de PVC por su resistencia a la penetración de raíces.

Una vez instalada la impermeabilización, los desagües se sellaron y se realizó la prueba de estanqueidad, llenando las cubiertas de agua y revisando a lo largo de un par de días que no se producían filtraciones.

Los siguientes pasos a seguir en la ejecución fueron la colocación de la capa separadora, la capa drenante y la capa filtrante. En este caso se instaló como capa separadora un geotextil de 100 gr/m2 de polipropileno no tejido, como capa drenante y de retención una lámina nodular de polietileno de alta densidad y como capa filtrante y absorbente un geotextil de 500 g/m2 no tejido de 100% poliéster reciclado.

Una vez instaladas estas tres capas era el momento de distribuir parte del sustrato, que llegó a la obra en big bags. El transporte de este material hasta los puntos de trabajo fue posible gracias a la pluma con la que contábamos en obra.

                     

Después de haber extendido una primera capa de sustrato, procedimos  a la colocación del riego por medio de tuberías principales de polietileno a las que se conectaron tuberías exudantes. Este sistema quedó oculto bajo una segunda capa de sustrato.

           

Antes de colocar la segunda capa de sustrato que dejaría ocultas las tuberías, pasamos a solucionar los detalles de los desagües y los perímetros. En este caso, con la manta retenedora realizamos perímetros que evitaban el paso de tierra. Posteriormente se rellenaron de grava.

En las cubiertas donde se realizó el semillado, una vez que se había extendido la segunda capa de sustrato, pasamos el rulo para compactar el terreno, posteriormente el rastrillo, esparcimos las semillas y volvimos a pasar el rastrillo y el rulo, finalizando con un riego manual.

Las especies que se eligieron para esta cubierta son una mezcla formada por especies herbáceas vivaces, subarbustivas autóctonas de matorral, garrigas de la mitad este y sur peninsular, gramíneas anuales y vivaces de flor.

Para las cubiertas con acabado de césped, se extendió una capa arena de río, se realizó un riego manual y posteriormente se colocaron los tepes de césped.

             

Después de unos 6 meses el aspecto actual de nuestras cubiertas es este:

¡Y seguimos esperando que crezcan mucho mas!