Vamos a contaros cómo es el libro, en profundidad.
Como bien dice la contraportada es un manual para madres y padres, yo añadiría que también para educadores, para ayudar a comprender mejor las emociones de los niños y las suyas propias, con el fin de educar con inteligencia emocional.
Aquí me gustaría hacer un parón y comentaros que me encantaría formarme en el mundo de la inteligencia emocional pero que ahora mismo me es imposible por falta de tiempo. Considero que la educación emocional y la inteligencia emocional son dos campos muy importantes en nuestra vida, a la hora de establecer relaciones sociales pero que desgraciadamente, sólo unas pocas escuelas lo trabajan. El libro ofrece cuentos adaptados a cada niños, según las necesidades para poder trabajar las emociones.
Como Maestra y Pedagoga me encanta la iniciación sencilla que hace a la Programación Neurolingüística, el repaso a ciertos psicólogos como Jung aunque sea de pasada, así como la identificación que propone de los niños con los colores. Después explica cada uno de esos colores para pasar a "Los cuentos de las pequeñas mentes de colores".
Además nos proponen La fábrica de los cuentos emocionales donde a través de diferentes emociones como el miedo, la ira, la vergüenza, la sorpresa,... nos relata cómo es cada niño-color lo que nos permitirá anticiparnos en situaciones y comprender mejor a nuestros peques y a nosotros mismos.
Para acabar nos sugieren algunos personajes para crear nuestros propios cuentos con algunas sugerencias o instrucciones para crearlas.
No me gustaría acabar sin mencionar las sencillas y cuidadas ilustraciones que tiene, con colores vivos, páginas grandes para que los niños puedan ver correctamente los dibujos, lo que permite también la interacción con el niño al que se lo leamos.
,Mi valoración: aunque no he podido leerme completamente el libro, me parece realmente bueno. Como ya he dicho antes la educación emocional es un aspecto importante en nuestras vidas pero muy olvidado. Creo que este libro es una herramienta a la que se le puede y debe sacar mucho provecho, no sólo las familias sino también los educadores y maestros. Quizá retome esta entrada en unas semanas cuando lo haya conseguido acabar completamente.
¿Qué os ha parecido? ¿Os gustaría una entrada sobre educación emocional?