La menopausia es la etapa de la vida de las mujeres caracterizada por la disminución de la producción de óvulos y del cese de la menstruación. En definitiva, es el fin de la etapa reproductiva. Cuando disminuye la producción de hormonas como la progesterona y los estrógenos, además de mermar la fertilidad y retirarse la menstruación, la menopausia afecta en más ámbitos del cuerpo de la mujer, y la piel es uno de ellos.
Entonces, nos preguntamos... ¿A que edad llega la menopausia? Esta etapa, conocida como menopausia o climaterio, comienza entre los 48 y los 54 años de edad, aunque cada mujer es diferente y tiene sus propios ritmos; de hecho, algunas mujeres la experimentan antes, lo que se conoce como menopausia precoz. Por eso son claves productos cosméticos recomendados por expertos como es el caso de Vichy neovadiol.
Esta revolución hormonal que sufre el organismo femenino, que se trata de una reducción drástica de las principales hormonas, provoca cambios notables en el cuerpo de la mujer como la aparición de la osteoporosis, la sequedad vaginal, pérdidas de orina debido a la debilitación de la musculatura pélvica, el desarrollo de los famosos sofocos, una mayor incidencia del insomnio o la alteración del estado de ánimo, entre otros síntomas.
Tal y como explican desde la web de la Asociación Española de Dermatología y Venereología (AEDV), la piel es la gran olvidada al hablar de la menopausia. La reducción de las hormonas que las mujeres sufren en esta etapa de sus vidas hace que la piel pierda elasticidad, más fina y escamosa aumentando así la aparición de eccemas, más arrugas y se incrementa el riesgo de padecer una infección. También aumenta la sequedad de la piel, algo que se da con mayor incidencia en la zona genital, lo cual incide de lleno en las relaciones sexuales.
Tips para mantener la piel en buen estado
Siempre es importante llevar un buen cuidado de la piel, pero durante la menopausia hay que extremar ciertos cuidados. Es necesario prestar más atención al nivel de hidratación de la piel utilizando productos específicos para este fin a diario. Del mismo modo es fundamental que esté limpia, por lo que es recomendable lavarse bien cada día utilizando jabones o geles suaves recomendados por los dermatólogos.
También se pueden minimizar o frenar determinados síntomas con la denominada terapia hormonal sustitutiva para hacer frente a este déficit o revolución hormonal, pero esta solución tiene que estar siempre guiada y pautada por un profesional médico.