Los pantalones culotte o te gustan o los odias. Mi relación con ellos siempre fue de amor-odio aunque al final pudo el amor y no me resistí a hacerme con más de uno en mi armario. Me costó seguir esta tendencia, de hecho, no me terminaba de convencer este pantalón por dos motivos: marca mucho la silueta y a las que medimos menos de 1.70 metros no nos estiliza mucho. Mis prejuicios se esfumaron cuando vi estos culotte grises. Me los probé en la tienda y automáticamente vinieron a mi mente muchos looks con ellos: para ir a la oficina, para el fin de semana, looks más formales, más casual…Así que ni me lo pensé y se vinieron a casa junto con otros iguales pero en otro color (ya os los enseñaré pronto).
Uno de los primeros looks que me vino a la cabeza fue este. Combinarlo con el trío de colores blanco -negro – gris y la verdad es que desde mi punto de vista fue todo un acierto. Una blusa blanca con detalle de crochet en la parte superior, una cazadora de cuero y unos zapatos abotinados con cordones, el mix perfecto.
Biker: Shein (aquí) / Blusa: Diosas del Pecado / Pantalones: Okeysi / Zapatos: Primark / Clutch: Rectangl