Según las tendencias que nos llegan de otros países, en Estados Unidos prefieren hacerse un tatuaje dental en los molares posteriores. Y en Gran Bretaña los diseños más demandados son las caras de Amy Winehouse, David Beckham, Tiger Woods y la más ’British’ de todas, la mismísima reina Elisabeth (que manda huevos…).
De verdad que las modas me sorprenden cada día más, primero los dientes separados y ahora ¡tatuajes! Sí, en los dientes… ¡increíble! Aunque no son permanentes y su colocación no es dolorosa a mí esta moda del tateeth que se ha extendido en Estados Unidos y en Gran Bretaña (hay que ver lo horteras que son las inglesas…) no me gusta nada, ¡lo que me faltaba era pagar por tener una mancha en mi dentadura perfecta!
Para el Dr. Iván Malagón, odontólogo especialista en Estética Dental y director de Iván Malagon*Clinic, lo primero que hay que tener en cuenta es que no se hacen directamente sobre el esmalte, sino que se trata de diseños que se aplican sobre implantes, fundas o carillas para no comprometer el esmalte. El procedimiento es muy sencillo: primero el usuario elige el motivo que se quiere tatuar, el dentista realiza un molde del diente donde se va a aplicar y es sobre este material sobre el que se imprime el diseño. La colocación se realiza de la misma manera que lo haríamos con implante, funda o carilla y sus cuidados también son los mismos. Pero sobre todo, el Dr. Iván Malagón advierte que "esta es una práctica que debe llevarla a cabo un odontólogo y siempre respetando el esmalte dental original para que tu salud oral siga siendo la adecuada y evitar posibles enfermedades bucodentales. Además, cuando te canses de tu diente tatuado, podrás remover esa funda y volver a tu diente original si más complicaciones, ¡menos mal, faltaría más! jajaja¿Qué opinas de esta tendencia?¡Deja tu comentario abajo!