Creo que no me equivoco si digo que rehabilitar un antiguo edificio/local en una gran ciudad, como una antigua imprenta y convertirlo en el propio hogar, es el sueño de muchos arquitectos y aficionados. Si en el ático de ayer se veían las vigas en el techo, en este loft madrileño encontrareis un ejemplo más de ello (precioso, por cierto, el dormitorio con ese juego blanco, rústico y papel pintado). Muebles de diseño y piezas más antiguas se mezclan en perfecta armonía, ajustándose a una paleta de tonos blancos, naturales y madera. (Los que tengáis fiesta, a disfrutar del día de Andalucía!)
Vía: Mi Casa