Se nos ocurrió hacer un bodegón con los recipientes de cristal vintage, muchos de ellos antigüedades por tener más de cien años, que poco a poco hemos ido consiguiendo, y todos relacionados con el mundo de la farmacia y el laboratorio.
¿Visteis el orificio que uno de los biberones tiene en el frontal? Se llama respiradero, y se bloqueaba con el dedo pulgar para controlar la entrada de aire y así regular la cantidad de líquido que salía hacia la boca del bebé. Pero nosotras le hemos dado otro uso...
Las flores, o quizás alguna planta, ocuparán el pequeño agujero para darle al biberón una nueva finalidad...,
..., decorativa, por supuesto...
Y con esa idea, recomponemos nuestro bodegón.
¿Conocíais estos biberones de cristal? ¡Contadnos!