Vía
Un apartamento en la montaña lleno de texturas y de vida … un salón que nos presenta una infinidad de zonas acogedoras, desde la zona habilitada como comedor con una bancada llena de cojines y una mesa de madera natural, hasta una zona de estar con textiles de aires bohemios y étnicos, todo ello presentado en un escenario que como base tiene la madera vista blanca en sus paredes y un bonito contraste con la madera natural en el resto de sus parámentos y vigas.
Desde el salón y comedor nos da paso a una cocina abierta, llena de luz , amplitud y orden. Una cocina en tonos grises perlados y tiradores en dorados, donde la serenidad de los tonos es el principal objetivo en este entorno. Aprovechando al máximo el espacio, y logrando un espacio más cómodo y accesible en su funcionalidad.