Hay en ocasiones, como en en este piso, que los elementos arquitectónicos que soportan la estructura de la vivienda quedan a la vista y forman parte de la decoración. Ladrillos, vigas de acero y tornillos se convierten en elementos decorativos que contribuyen a dar carácter a la vivienda, dando un aire industrial a este apartamento de marcado estilo nórdico. El suelo de madera también cobra protagonismo con un tratamiento de envejecido y con la colocación de baldosas hidráulicas a modo de felpudo en la cocina. En cuanto a su distribución, la falta de metros cuadrados agudizó el ingenio de sus diseñadores, construyendo el dormitorio de matrimonio sobre un altillo, utilizando la parte inferior como espacio para grandes armarios.