Dejar de fumar es más fácil de lo que crees, ¿quieres dar el paso?

Por Mundotlp @MundoTLP


Existe un mito sobre la poca eficiencia de los tratamientos anti-tabaco para personas con una enfermedad mental, así como en torno al interés por parte de estas personas en dejar de fumar, que suele decirse que es pequeño. Sin embargo, esto ya se ha desmentido con numerosos estudios que ponen de manifiesto un interés similar al de la población en general.Aun estando dentro de esta “trampa terapéutica”, ¿te has planteado alguna vez dejar de fumar o simplemente lo consideras un imposible al que no te crees capaz de enfrentarte?  Sin duda, es una decisión importante, pues supone aceptar que algo que aparentemente te aporta un soporte de “alivio” diario, a largo plazo te está causando daños irreversibles.Te invitamos a dedicar un pequeño espacio de tu tiempo a reflexionar sobre todo lo que ganarías si das el paso y te atreves a dejar de fumar. Solo necesitas saber cuál es la mejor fórmula para conseguirlo.¿Por qué hacerlo?El tabaquismo constituye un factor determinante a la hora de explicar las diferencias existentes entre la esperanza de vida de las personas con una enfermedad mental, como ocurre con la depresión y la población normal. ¿A qué se debe esto? Pues básicamente a que el consumo crónico de nicotina se asocia a:-Una mayor predisposición a padecer o agravar ciertas enfermedades como cáncer y varias enfermedades médicas crónicas. Entre ellas: enfermedad cardiovascular (mujeres especialmente), síndrome metabólico, enfermedad pulmonar obstructiva crónica, asma, hipertensión y enfermedades cerebro-vasculares.-Un aumento de los síntomas más graves de depresión, más tentativas de suicidio, mayor impulsividad y mayor gravedad de la enfermedad en general.-Muchas más probabilidades de padecer un trastorno por abuso o dependencia de alcohol u otras sustancias de sustancias.¿Cómo puedo hacerlo?1. Elige el momento en que tu estado de ánimo sea estable, así los síntomas de abstinencia (disforia o falta de humor, insomnio, intranquilidad, etc.) que se presentarán cuando dejes de fumar serán más llevadero para ti.2. Siempre debes hacerlo de forma progresiva y nunca con límites de “todo o nada”. Una buena forma de conseguirlo puede ser intentar fumar un cigarrillo menos cada semana. Para ello, rellena tu caja de tabaco con el número de cigarrillos que puedes fumar y no tengas más a tu alcance.3. Con autocontrol y paciencia. Al consumir nicotina tu cerebro segrega dopamina, la cual actúa en los conocidos receptores del placer. Por tanto, es normal que tengas asociada dicha experiencia con algo positivo y reforzador. Además, se crea un hábito psicológico que, como cualquier aprendizaje que se refuerza, tiende a repetirse. Romper estas redes neuronales establecidas requiere de un nuevo proceso de aprendizaje y adaptación.¿Existe algún tratamiento?Los tratamientos que funcionan con la población general han demostrado una eficacia similar en la población con enfermedad mental. La mejor evidencia científica en cuanto a resultados combina dos tipos de intervenciones:1. Farmacoterapia: La terapia sustitutiva con nicotina, bupropión de libración sostenida, y la vareniclina constituyen los tratamientos de primera línea para dejar de fumar aprobados por la FDA. Los parches o chicles de nicotina también pueden ayudarte en un inicio. Lo más recomendable es que acudas a tu médico y sea este el que valore lo mejor para tu caso particular, ya que algunos fármacos también recomendados pueden interaccionar de manera negativa con tu medicación habitual. Esta fase suele durar de 8 a 12 semanas aunque puede mantenerse hasta un año.2. Psicoterapia: La terapia cognitivo-conductual (mayor índice de logros en la modalidad grupal) o la terapia aversiva son las más utilizadas para dicho tratamiento. La eficacia suele ser mayor cuanto más sesiones se den y más largas sean estas.Además existen algunas pautas relacionadas con cambios en tus rutinas diarias que pueden ayudarte como:· Cambiar los momentos cruciales del día en los solías que fumar o insertar nuevas actividades no asociadas con dichos momentos.· Modificar la decoración de los principales sitios donde fumabas.· Premiarte cuando consigas pequeños pasos con algo que te guste.· Tener personas de apoyo que te motiven y den sostén emocional cuando lo necesites.¿Sigues dudando en dar el paso? Ya tienes todo lo que necesitas saber, anota una fecha de inicio y hazte un diario personal o cartulina. Escribe en un lado todas las razones por las que ahora quieres dejar el tabaco (lo que ganarías) y en otro contiguo, aquellos motivos por los que querrías continuar fumando. Utilízalo  como tu motor motivacional inicial, así como tu armadura anti-recaídas. Y por último nunca olvides que el mayor poder es siempre creer y saber que sí puedes.http://elmundotlp.blogspot.com/es