Después de una semana de nuevo con la rutina, por fin soy yo de nuevo. He vuelto al trabajo, al blog, al gimnasio, a las visitas a mis nietos, a las tareas domésticas, en fin a descansar de las vacaciones, je, je. No es que no me guste tener vacaciones, ya os he dicho muchas veces que me encanta disponer de unos días para bajar al sur a ver el mar, a leer un buen libro con el fondo de las olas, a pasear, y a disfrutar de la oferta gastronómica de los chiringuitos. Pero ahora me llevo a mis nietos, en esta ocasión me he atrevido con los dos, y aunque me lo he pasado "pipa" con ellos, "la bisagra" ha tardado en recuperarse. ¡Ojo! que no cambio esos momentos por nada del mundo.
En esos diez días, he visto como Julián (16 meses) empezaba a decir abuelo y abuela, así con todas las letras, con intención por supuesto de que le cogiéramos, le preparásemos la comida o le llevásemos a jugar a los columpios o a la playa. También me he reído lo mío con Sofía, que cumplió los tres añitos estando allí. Sus narraciones, explicaciones, preguntas y verborrea han sido una dosis de positivismo increíble. Todavía me río cuando recuerdo como gritaba horrorizada al ver una minúscula araña diciendo ¿Porqué hay arañas si no es Halloween?, je,je.
Bueno, al grano. Como os decía al principio he necesitado una semana de vida "normal" para recuperarme, así que lo primero que preparé fue una deliciosa receta realizada con la ayuda de una marca de confianza Indecove, cuyos purés y cremas tienen el sabor de los caseros. Así de forma rápida pudimos cenar estas delicias de huevo en crema de calabaza.
Ingredientes:
4 huevos
1 bote de crema de calabaza con queso grana incove
125 ml de nata líquida
Pimentón dulce
Sal
Preparación:
Repartimos en cuatro recipientes individuales la crema de calabaza Indecove y las ponemos al baño María en el horno precalentado a 200º.
Cuando el agua rompa a hervir, abrimos el horno e incorporamos un huevo en cada uno de los recipientes, y un chorrito de nata líquida.
Tapamos los recipientes con papel de aluminio y dejamos hacer al baño maría durante 10'. La yema nos tiene que quedar líquida. Espolvoreamos con pimentón dulce y sal, y servimos inmediatamente.
Una verdadera delicia, ya que esta crema de calabaza con queso grana lo es por si misma. Si ya se acompaña de estos huevos con el toque de nata y pimentón, podemos entrar en éxtasis.
Una excelente opción para preparar en un periquete un plato de lujo.
¿Se puede repetir?
Bon appétit