Depresión

Publicado el 01 julio 2017 por Miguel Angel Verde Valadez @arcangel_hjc
¿Qué es la depresión?
La depresión es una enfermedad que se caracteriza por la presencia prolongada de un estado de ánimo abatido que afecta a la capacidad para llevar a cabo las actividades cotidianas. Entre el 5-20% de la población se ve afectada en algún momento de su vida y es más frecuente en las mujeres
Se trata farmacológicamente, mediante psicoterapia o combinando ambos sistemas.
Cuando una persona ha pasado por un periodo depresivo tiene mayor riesgo de padecer otro.
¿Por qué nos deprimimos?

Existen tanto factores predisponentes como factores precipitantes que pueden contribuir a que una persona se deprima.

Factores predisponentes
Son característicos de la personalidad o del estilo de vida de una persona que la hacen susceptible a la depresión. Pueden estar relacionados con factores genéticos, con experiencias de la infancia o con circunstancias sociales.
Son desencadenantes que provocan directamente la crisis depresiva. Un acontecimiento vital estresante, como por ejemplo la pérdida del trabajo o el final de una relación afectiva, puede desencadenar la depresión. Puede aparecer también como efecto secundario de ciertos medicamentos, como los betabloqueantes que se usan para el control de la tensión arterial (Propanolol).
En la depresión el metabolismo cerebral está alterado, debido a que las concentraciones de ciertas sustancias químicas son anormales. El objetivo de los antidepresivos es, precisamente, rectificar los desequilibrios de esas sustancias químicas del cerebro.
¿Cómo se siente una persona deprimida?

La depresión se caracteriza por la presencia prolongada de un estado de ánimo abatido que afecta a la capacidad para llevar a cabo las actividades cotidianas. No es sólo "estar depre" una temporada.
Entre los síntomas de la depresión se incluyen:
Tristeza
Falta de interés en actividades que antes proporcionaban satisfacción
Falta de atención y de concentración
Trastornos del apetito; suelen consistir en pérdida del mismo, pero también se puede tener más hambre de lo normal.
Trastornos del sueño, que a menudo hacen que la persona se despierte muy temprano, y con la sensación de que el sueño no ha sido reparador.
Cansancio
Disminución del impulso sexual (libido)
Sentimientos de inutilidad o de desesperanza
Sentimientos de culpabilidad o de vergüenza
Pensamientos de autolesión e ideas de suicidio
¿Qué se puede hacer?

Averigüe si está sufriendo una depresión
Busque ayuda en cuanto aparezcan los síntomas
Lleve un estilo de vida que sea positivo para la salud mental: pase tiempo con los amigos, hable con los demás sobre ciertas preocupaciones o tensiones, busque tiempo para algún pasatiempo que le guste, haga ejercicio, no beba demasiado alcohol, evite fumar y no consuma drogas.
¿Cuál es el curso de la enfermedad?

Algunas crisis depresivas se curan espontáneamente, es decir, sin ningún tratamiento. Pero no siempre es así y a menudo es necesario tratarlas. El tratamiento puede reducir tanto la duración como la gravedad de una crisis depresiva.
La mayoría de las personas sólo padecen un episodio depresivo durante su vida, o a lo sumo unos pocos. Pero en algunos casos puede haber recaídas frecuentes y es necesario establecer una terapia preventiva (profilaxis). El riesgo de recaída es menor si se siguen tomando antidepresivos durante seis meses después de recuperarse de la crisis depresiva.
¿Cómo se trata la depresión?

El tratamiento de la depresión debe adaptarse a las necesidades de cada paciente. La mayoría de las crisis depresivas son tratadas por el médico de atención primaria o por un psiquiatra del ambulatorio. Los pacientes con depresiones más graves en ocasiones necesitan ingresar en un hospital para recibir tratamiento.
Los estudios de investigación han demostrado que los siguientes tratamientos son eficaces en caso de depresión leve o moderada:
Medicamentos antidepresivos como los antidepresivos tricíclicos, los inhibidores selectivos de la recaptación de serotonina o los inhibidores de la monoaminoxidasa.
Ciertos tipos de psicoterapia, especialmente la psicoterapia cognitiva y la psicoterapia interpersonal.Las investigaciones también indican que la hierba de San Juan o hipérico y la terapia de resolución de problemas son tratamientos eficaces para algunas personas con depresiones leves o moderadas.
También se ha demostrado que los siguientes tratamientos resultan eficaces en los casos de depresión grave:

Medicamentos antidepresivos.

El electroshock se ha mostrado como un tratamiento eficaz para las depresiones graves que no responden a otros tratamientos o cuando se desee un efecto rápido (por ejemplo, en algunos casos de depresión posparto grave).