Texto original escrito por Ana. Sígueme en Twitter.
La diabetes es un trastorno que no tiene cura. Esto quiere decir que la persona diagnosticada con él será diabética toda su vida. Esta realidad exige que la persona realice cambios profundos en su manera de vivir. Para algunos pacientes es necesaria la inyección de insulina, para otros no. Pero en ambos casos es fundamental llevar una dieta especial, hacer ejercicio, tomar agua, mantener un peso saludable y realizarse revisiones médicas frecuentemente.
No me gusta clasificar a la diabetes como un “padecimiento” porque no creo que se tenga que PADECER. Es un simple hecho que, si bien no debe tomarse a la ligera, debe aceptarse como tal y adaptarlo a la vida de una manera saludable y positiva.
Una forma de hacerlo es acudiendo a grupos de apoyo para personas diabéticas y para los familiares de diabéticos. En ellos las personas pueden compartir sus experiencias y expresar sus dudas con otras personas que también están viviendo el mismo proceso. Además, recibirán la asesoría de expertos en el tema (médicos, nutriólogos y terapeutas) que les ayudarán a entender su condición y adoptar nuevos hábitos.
En México existen diversos grupos que ofrecen este apoyo, la mayoría de forma gratuita. He aquí el directorio de clubes de ayuda de la Federación Mexicana de Diabetes donde pueden encontrar las sedes para su ciudad.
Si ustedes o algún familiar cercano han sido diagnosticados con diabetes, recuerden que no están solos y que es muy importante actuar lo antes posible para controlar esta condición de una forma sana, tranquila y sencilla.
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