Diario Aragonés – De dioses y hombres

Publicado el 01 abril 2011 por 39escalones

Título original: Des hommes et des dieux

Año: 2010

Nacionalidad: Francia

Dirección: Xavier Beauvois

Guión: Xavier Beauvois, Etienne Comar

Fotografía: Caroline Champetier

Reparto: Lambert Wilson, Michael Lonsdale, Olivier Rabourdin, Jacques Herlin, Sabrina Ouazani, Goran Kostic, Philippe Laudenbach, Xavier Maly

Duración: 120 minutos

Sinopsis: Ocho monjes cistercienses que viven en perfecta comunión con sus vecinos musulmanes deciden quedarse en su monasterio de las montañas del Atlas argelino a pesar de la creciente ola de violencia originada por el enfrentamiento entre el gobierno y los grupos fundamentalistas islámicos, y que amenaza la vida de todos los extranjeros residentes en el país.

Comentario: Xavier Beauvois ofrece en De dioses y hombres, Gran Premio del Jurado en el último Festival de Cannes, algo más que la emocionante crónica de unos hechos reales. Es un relato sobre los principios fundamentales del humanismo y la naturaleza de la fe, y, por encima de todo, una lección moral. Contada al modo clásico, contagiada de los ritmos y cadencias propios de sus protagonistas, de lo que debe significar realmente el discurrir del tiempo entre los muros de un lugar de oración y recogimiento, la película va desgranando pausadamente una historia que en su primera mitad es un ejemplo de convivencia religiosa: un monasterio católico, residuo de la etapa colonial, es polo de prosperidad y también de auxilio social para los musulmanes que viven a su alrededor. La relación entre ambas comunidades, basada en el respeto mutuo y en la aceptación de la cultura del otro como una forma diversa de interpretar una misma realidad tras la cual ambas, independientemente del nombre con que la denominan, Dios o Alá, identifican la misma mano creadora, incluye la celebración colectiva de las festividades más importantes de unos y otros, la participación en los mercados y el comercio local, y también el servicio que el dispensario médico del monasterio otorga desinteresadamente a la población del lugar [continuar leyendo]