Los animales de punto y rellenos de lana son otros de los juguetes sencillos y naturales que a los niños les encantan. Hay tanta diferencia de jugar con un animal de plástico a tener uno de éstos en las manos. La textura natural, suave y cálida. La consistencia, blanda y que invita a manipularlo y sentirlo. La forma más primitiva, que estimula la imaginación y la creatividad de los niños.Como en el reto de vida consciente, uno de los objetivos consistía en aprender una nueva actividad, me estoy iniciando en el punto con dos agujas. Hasta ahora sólo había experimentado con el ganchillo, que sigue siendo mi preferido, pero poco a poco le voy cogiendo el gusto al punto bobo, que es el que se utiliza para hacer este tipo de animales.Ha sido gracias a Cecilia, maestra de la Escuela Waldorf Mallorca y que nos enseña muchísimo cada miércoles a las mamás que participamos en el taller de manuales, que he aprendido a hacer esta familia de gallo, gallina y su pollito. Son realmente muy fáciles. Y si no sabes hacer punto, pero sí ganchillo, te adelanto que también lo puedes hacer con punto bajo. La ventaja de hacerlo con punto de dos agujas es que queda más prieto y el relleno no se ve ni se sale nada por los agujeritos, pero de ganchillo también quedan bien.Y si tampoco sabes hacer ganchillo, entonces puedes hacerlos de fieltro, más fácil todavía. De hecho uno de nuestros pollitos lo es y Sunflower juega con él divinamente.Vamos allá…
Materiales
- Lana hilada para tejer
- Lana cardada para rellenar. También puedes rellenar los animales con fibra sintética.
- Agujas de punto de 5 o 6 mm
- Aguja de lana para coser
- Aguja de ganchillo de 3 o 4mm para hacer las crestas
Paso a paso
He fotografiado el paso a paso del gallo, que es el más grande y algo más elaborado, más que nada porque lleva cresta y cola, pero las instrucciones son las mismas para todos los componentes de la familia, lo único que cambia es el tamaño.
Para saber que ya has tejido un cuadro lo único que tienes que hacer es ir doblando la labor de vez en cuando en diagonal hasta que una vez doblado queden dos triángulos iguales a cada lado.
Para la mamá gallina el cuadro es de 15 puntos y el pollito es de 10 puntos, pero en este caso en ambos solo hay un cabo, es decir que la lana es más finita.
En realidad el tamaño puede ser como tú quieras, sólo debes tener la referencia de un cuadrado.
(Paso 2) Doblamos a la mitad el cuadrado y lo cosemos
Cosemos los lados que quedan abiertos con lana del mismo color, pero dejando una pequeña abertura para rellenarlo.
Yo los relleno con lana cardada natural que compré en Santiago Geijo. Un kilo de lana (que es una bolsa enorme) me costó unos 12€ y viene enrollada en cinta, lo que es muy práctico para ir cogiendo el trozo que necesites. Lo único, es que debes hacer el pedido por teléfono y tardan una semanita en enviártelo, pero si vas a hacer varias manualidades con lana, vale la pena comprarla allí.
Si no tienes lana, también puedes rellenarlo con fibra sintética, aunque el efecto no es el mismo.
Para rellenarlo y que quede con cierta consistencia la recomendación sería hacer un rollo de lana, como el que se hace para hacer el cuerpo de los gnomos Waldorf, que te enseñé aquí.
También puedes hacer 2 o 3 puntos bajos en la barbilla.
<< Un juguete bueno es aquel que sin ser nada concreto puede ser todo.- Francesco Tonucci>>.
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