Aquí va mi primer tutorial DIY de crochet, inspirado en la temática propuesta por Mi armario coqueto en su reto mensual #diymaniacas.
¡Este mes de noviembre la cosa va de bigotes! Una propuesta para apoyar el movimiento Movember (moustache+november) que se organiza en todo el mundo para concienciar sobre afecciones y temas de salud típicamente masculinos (cáncer de próstata y similares).Como me estoy iniciando en el mundo del ganchillo de la mano de mi queridísima Amitakoa, que cada semana me enseña nuevos puntos y trucos en su precioso taller de madera en medio del bosque de Sencelles (en Mallorca), ya me atrevo con minproyectos como éste.
Esta funda de taza me parece de lo más cute y práctica, y es muy fácil de hacer.
¿Qué necesitamos?
- Ovillo de lana
- Aguja de crochet del tamaño adecuado para la lana (viene indicado en el mismo ovillo. En este caso he hecho dos fundas diferentes, una con lana rosa de tamaño 7mm y otra gris de tamaño 4mm, así también ves la diferencia. Obviamente con aguja más grande, avanzas mucho más rápido)
- Un poco de fieltro
- Un par de botones
- Pegamento textil
Antes de empezarPara hacer este proyecto sólo vamos a necesitar dos tipos de puntos: punto de cadeneta y punto bajo. ¡Ni te imaginas la de cosas que se pueden crear sólo con estos puntos básicos!Si no sabes hacerlos, te dejo estas instrucciones de mi libro favorito de crochet: The Crochet Stitch Bible. Son sencillos y creo que se entiende muy bien aunque sea en inglés.
InstruccionesFila 1. Empezamos haciendo una cadeneta hasta obtener el ancho que deseemos para nuestra funda. En el caso de la lana rosa (más gruesa) he hecho una cadeneta de 11 puntos. En la funda gris, la cadeneta es de 15 puntos.Fila 2. Le damos la vuelta a la labor. Empezamos hacer puntos bajos en el penúltimo punto de la cadeneta, hasta el final. Ya tenemos la primera fila de puntos bajos.Fila 3. Volvemos a dar la vuelta a la labor (esto lo haremos en cada fila para empezar siempre a ganchillear desde la derecha hacia la izquierda) y seguimos haciendo puntos bajos desde el último punto de la fila 2 hasta el final. Filas siguientes. Seguimos haciendo filas de puntos bajos hasta que el largo de la labor sea suficiente para cubrir toda la circunferencia de nuestra taza (cada taza es diferente, y conviene ir comprobando de tanto en tanto).
Para que te hagas una idea en la funda rosa he hecho un total de 27 filas, y en la de lana gris 42 filas (hay diferencia, ¿eh?)
Última fila. ¡Ya se está acabando! Hacemos cinco puntos bajos y cuando llegues al punto 6, sin insertar la aguja, hacemos una cadeneta al aire de 15 puntos (o el número que consideres según el grosor de tu hilo), deja 4 puntos bajos sin cubrir y desde ahí sigue haciendo puntos bajos hasta el final de la fila.Lo siguiente es coser el botón elegido cerca del borde, en las primeras filas de la labor.Ahora solo falta añadir el motivo que quieras para decorar la funda, en este caso un hermoso bigote, pero cualquier dibujo queda bonito (un corazón, una estrella, una flor,…), las posibilidades son infinitas.
Para el moustache he utilizado este patrón que he calcado en el fieltro y recortado.
Ya la puedes colocar a tu taza favorita y disfrutar de este tacto cálido y agradable que aporta la lana, y además no quemarte con la taza. Yo, que soy consumidora habitual de infusiones, y que me gustan bien calientes, ¡estoy encantada con mis nuevas fundas de taza DIY!
Por cierto, si quieres ver otras grandes creaciones inspiradas en el motivo moustache, pincha aquí, ¡y también puedes votar el que más te guste!
<<Cada taza de té representa un viaje imaginario - Catherine Douzhell>>
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