Según los niños, a los dinosaurios les faltaban unos huevos (están en todo) y me he acordado de un tutorial que vi hace unos días en el blog Con dos botas de agua, que me encanta.
He pensado que a los niños les gustaría eso de que los huevos blancos cambiaran de color, así que nos hemos puesto manos a la obra.
Y sí, se lo han pasado bien. Eso sí, no me he dado cuenta que el colorante es "colorante", como su mismo nombre indica, y Marcos anda con la mitad de los dedos de color amarillo...
¿Qué os parece? ¿Os gusta el resultado?