Pues bien, últimamente, y aunque el tiempo no es algo que me sobre, he estado trabajando en la restauración de una báscula antigua, inspirado por mi post decorando con básculas antiguas. Conseguí, después de mirar largo y tendido básculas baratas y bonitas para arreglar dos basculas, como le gusto mucho la primera mi madre me pidió si le podía hacer una, así que el doble de trabajo. Lo cierto es que estaban pésimas las dos. La primera oxidada y ni siquiera pesaba, la segunda hasta arriba de grasa y con una mano de elegante pintura blanca a brochazos cortesía del anterior propietario. Pintada directamente sobre grasa y suciedad, un trabajo fino fino vamos. Las dos son casi idénticas, de la marca Mobba, que casualmente es una fábrica de Badalona que es donde yo vivo. De momento sigo trabajando en ellas, requieren mucho trabajo para dejarlas bonitas así que cuando pueda, las publicaré terminadas, de momento, este adelanto: