Puesto porJCP on Jul 25, 2012 in Autores
El PMI alemán (el PMI es un índice de compras, para entendernos) sigue cayendo, y lo hace a mínimos de más de tres años.
En primavera Alemania salvó la recesión por los pelos, pero las políticas de Merkel se han convertido finalmente en un boomerang que ha acabado afectando tanto a sus exportaciones como al consumo interno de los alemanes. La producción manufacturera alemana está cayendo. Incluso cierran ya fábricas alemanas en el exterior, como Adidas en China, limitándose así a las empresas chinas subcontratadas a modo de justificación.
En una eurozona devastada tras cuatro años de “ajustes” y políticas “neocon”, el motor se para. Y con tal salvar el propio pellejo, se decide exprimir a los deudores. Mostrándose crítico, un consejero económico alemán, de nombre Peter Bofinger, miembro del “Consejo alemán de expertos económicos”, dijo recientemente: “las ayudas a la banca no tienen nada que ver con el intento de ayudar a los países en problemas, sino con ayudar a nuestros bancos, que tienen gran cantidad de deuda de aquellos países” (creo que por aquí anda el enlace correcto: http://www.sueddeutsche.de/wirtschaft/wirtschaftspartei-in-der-krise-die-fdp-hat-mit-dem-feuer-gespielt-1.1145846) .
Si definitivamente se aprueba el rescate a España (que el gobierno tratará de vender como una nueva “línea de crédito”), basta sólo con que las contrapartidas sean similares a las de los casos griego o portugués para que: 1) se despida (o en el mejor de los casos, prejubile) a un tercio de los funcionarios y/o empleados públicos (otro millón de parados), 2) se bajen las pensiones, 3) siga el aumento de tasas e impuestos, 4) se recorte más el subsidio de desempleo y 5) se bajen más los salarios (hasta alcanzar el nivel de devaluación que implicaría salir del euro, pero en ese caso libres del nuevo incremento de deuda).
Lo que traería como consecuencia (ya sólo el punto 5 por sí solo) la siguiente secuencia: 1) mayor quiebra de pymes -> 2) más paro -> 3) mayor desplome del consumo -> 4) más quiebras de pymes -> 5) más paro, paralela a una mayor restricción del crédito, dado el escenario.
En Grecia, por ejemplo, el paro pasó de estar en torno al 12% a más del 20% en los dos años y medio posteriores al primer rescate (primavera del 2010). El pasado febrero, después de todas las “ayudas” recibidas por el país heleno, el PIB cayó un 6.8%.
Ahora mismo sólo los partidos monaguillos de la Banca (PP y PSOE) y los medios a su servicio defienden la idoneidad del rescate. Si el gobierno lo acepta, sentencia al país y nos sentencia a todos. Y quien no lo vea así, que tenga la gentileza de señalar qué vía queda abierta a la recuperación en semejantes condiciones. ¿Quizá la de los “minijobs” cuando supuestamente escampe el cielo, allá por el 2015? ¿Y adónde se va con eso?.
Lobo