Dunas, 4×4, y pilotos profesionales. Un día perfecto en Peru.

Por Alberto @Freshimports

Este es el típico reportaje que nos encanta traeros. Donde se plasman experiencias que vivimos como un niño que recibe los regalos en navidad. En este caso, Edu tuvo la oportunidad de volver a estar con el penta-campeón peruano de Rally en el WRC2. Y digo volver porque ha tenido la suerte de compartir otras experiencias con él. En esta ocasión, decidieron ir a probar dos 4×4 algo especiales, por las dunas. Pura diversión entre amigos.

Divertirse en 4×4 en Perú es más que posible. Compartiendo un día de motor con Nicolas Fuchs

¿Que os parecería si os invitasen a pasar un día de fin de semana en las dunas, rodeado de motor, a bordo de dos 4×4 preparados y con pilotos profesionales? Yo creo que pocos de vosotros, por no decir nadie rechazaría esa oferta tan suculenta.

Uno de los pilotos era Nicolas Fuchs. Ya hemos dicho que ha sido penta-campeón en el WRC2, pero la noticia más reciente es que ha logrado dejar a su país en lo alto, tras culminar el Rally Dakar con un puesto numero 12, siendo este el mejor registro de un piloto peruano en automovil de la historia del Rally. Y el otro piloto era Milan Edgar, que compite en la modalidad local de Cross.

Se comenta que existen posibilidades de que el Dakar vuelva a Perú. Practicar en las dunas de Lima dice mucho a favor del terreno, siendo apto para un campeonato tan importante como lo es el Dakar.

Y ahora bien. ¿Que coches utilizan para poder entrenar y disfrutar sobre un terreno como este? Por un lado había una Mitsubishi Montero de color blanco, con motor turbo 3.2, con una mejora del intercooler, habiéndolo sustituido por uno que está preparado especialmente para la WRC. El motor está físicamente de serie, pero lleva instalada una reprogramación para obtener más potencia. Y como no, las suspensiones son un tanto especiales. De la marca King y con un precio de 40 mil dólares, unos 37 mil euros, la Montero ahora dispone de lo necesario para comerse cualquier tipo de terreno.

El otro todoterreno es una Toyota Tacoma de color gris. Con motor 3UZ y la caja de cambios de la primera Tacoma, que era manual. El problema es que las nuevas vienen con el cambio automático, cosa que no suele gustar a muchos pilotos. La suspensión como no, también es King, muy parecida a la de la Montero.

El día transcurrió sin ningún percance, y pudieron disfrutar al máximo. Según comenta Edu, Fuchs es un piloto muy familiar y humilde. Le encanta compartir momentos con la gente que lo apoya sin subírsele a la cabeza su fama. Dice que ir de copiloto con él es inhumano, va a velocidades que uno jamás se pensaría que puede alcanzar en terrenos adversos. Solo hacía falta verlo correr con la Ford HRX en el Dakar por televisión, para ver como ese prototipo diseñado en 2012 volaba por encima de la tierra.

Esperamos seguir pudiendo traeros historias como estas y sobre todo que a Fuchs le vaya increíble en su próximo Dakar.

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