Hoy os traigo un post exprés del que estoy totalmente enamorada porque si me entretengo mucho os quedáis sin poder lucirlo estas fiestas.
Aunque ya ha pasado la navidad, y lo de la decoración de arbolitos y Papas Noel, aún en casa tenemos los adornos puestos y esto, de verdad que (no es porque lo haya hecho mi increíble madre) me parece de lo más ocurrente que he visto últimamente.
Mi madre es una persona que vive creando todo el rato. Vamos, está en MODO IMAGINAR las 24 horas del día y la envidio un montón por eso. Ella coge se le rompe algo y de camino al cubo de la basura ya se le han ocurrido 20 segundas vidas para ese artículo que le salvaran la vida antes de acabar en el cubo. Esto que os traigo hoy es un ejemplo de ello. Y tú ¿qué harías con un estropajo y un collar roto? Pues mi madre, un árbol de Navidad. Así, de la nada. ¿Quieres ver cómo? Pues atento..
¿QUÉ NECESITAS? 1 BOTELLA VACIA. Nosotros hemos utilizado una de cristal pero con una de plástico también te servirá. 2 ESTROPAJOS. De esos “Scoth Brite” de toda la vida. 1 COLLAR ROLLO. Lo que queremos son las cuentas, así que si lo que tienes son algunas sueltas, ya estás listo para empezar a trabajar.
¿QUE HAGO CON TODO ESTO?
Más fácil imposible. Coges tu botella y pegas alrededor el estropajo cubriendo bien el cristal. Dale un poco de forma. Pon tus cuentas a modo de ornamentos navideños ¡¡imaginación al poder!! Una estrellita por ahí, una bolita por allá y…¡¡TADÁ!!
Espero que os haya gustado esta nueva aventura con el reciclaje. No os quejareis ¡¡os lo hemos puesto muy fácil para que vuestra imaginación vuele!!
Esperamos vuestros comentarios, locuras y diseños en esto que pone ahí abajo…. Si, si CO-MEN-TA-RI-OS ¡¡A disfrutar amigos!!