Eco-guay y marketing online: ¿monja meets puta?

Por Valedeoro @valedeoro

Pocas veces que mezclo este blog de sostenibilidad minimalismo con mi trabajo de consultora de márketing en redes sociales. Ha llegado el momento de mezclarlo, y mucho, ya que quiero responder a la pregunta del título que me llegó de forma muy parecida (y anónima) hace un mes a través de la plataforma formspring. Se puede ver la respuesta corta en el mismo foro, pero aquí, quiero dar una visión más global del marketing y de la ecología.

Por supuesto no es la primera vez que escucho la pregunta. Soy lo que llaman consumidora consciente o responsable, además tengo hábitos bastante minimalistas en lo que se refiere a las compras. Me gusta reinventar, intercambiar, supra-reciclar y en general buscar alternativas para todo, y al mismo tiempo trabajo de consultora de márketing online. A primera vista parece una contradicción. Parece, ya que aunque compro muy poca cosa por impulso, y necesito más tiempo para decidirme por la lavadora más ecológica y la cesta del perro más sostenible, sí que compro. Y el tiempo que gasto en buscar informaciones lo que me ha llevado al marketing.

Para salir del paradigma de la obsolescencia programada como consumidores necesitamos dos ingredientes: productos diseñados para durar y información sobre dónde conseguir estos productos. Es decir, publicidad ética que tiene como función informar e inspirar al usuario para hacer una compra con cabeza y corazón, que tenga un impacto positivo más allá de su propia experiencia. La publicidad es una herramienta, y como cualquier herramienta se puede utilizar para distintas finalidades. Puede crear un deseo insaciable por una felicidad que parece venir de un producto determinado, o puede crear conocimiento y conciencia de la responsabilidad que conlleva la compra de un producto. Culpar a la herramienta por el uso que se hace de ella oculta el verdadero dilema.

El dilema consiste en que necesitamos más opciones verdes para nuestro consumo diario. Más opciones verdes cerca de casa, más opciones a precios accesibles. Necesitamos más opciones para poder hacer una verdadera decisión, y necesitamos más información sobre estas opciones. Necesitamos más empresas verdes, más emprendedores comprometidos con el medio ambiente y la sociedad, más servicios que también tengan en cuenta su impacto en la sociedad. Y estas empresas y emprendedores tienen que tener la opción de establecerse en el mercado como una opción para todo el mundo.

Pero para que sea una opción para todos, tiene que correr la voz. Tengo que saber que existe una alternativa viable para mi consumo de frutas y verduras más allá de las cooperativas. Necesito información sobre dónde comprar mi té de procedencia ecológica y quiero enterarme cuando ofrecen servicio de car-sharing en mi ciudad. Esto no lo sabría si todas estas empresas no hicieran alguna forma de divulgación. Llámalo marketing, “hacer contactos” o como prefieras, lo importante es que la información llegue.

Así que respondiendo a la pregunta anónima, es posible ser eco-friki y consultora de márketing online (para la empresa verde, por supuesto) (LINK8). No sé si la puta se ha hecho monja, o la monja ha salido del convento, pero sí que sé que nos conviene más visibilidad de alternativas verdes en el mercado a todos, tanto a los consumidores, como a las empresas y los emprendedores verdes.

>>Fin del sermón<<

Si quieres recomendarme a una empresa verde que conozcas, adelante: ValeDeOro – Sostenibilidad y Comunicación


Foto: Joe Shlabotnik / flickr