- Actuará como elemento catalizador entre el barrio y el joven.
- Tendrá que introducirse en el mundo del chaval, asumiendo su propia cultura y su problemática.- Será elemento creador en todos los aspectos: juegos, diálogos, actividades...- Acogerá las demandas de los chavales-as y las interpretará.- Hará de referencia tiempo-espacio.- Se pondrá en contacto con las diferentes instituciones del barrio con el fin de dar a conocer abjetivamente la problemática de los menores y jóvenes y encontrar pautas y salidas válidas.- Será elemento activo en la vida del barrio, participando en las reivindicaciones de éste y con la idea de que sólo cambiando al barrio cambiarán las gentes que en él viven.- Realizará una educación divertida, sacando recursos pedagógicos de cualquier lugar, sobre todo de la vida diaria. No precisa muchos recursos materiales. La vida de los chavales es fuente de experiencias y aprendizaje.- Ha de ser imaginativo, descolocante, responder con patrones de conducta no habituales, pero con seguridad, cariño, firmeza y flexibilidad. Los chavales están acostumbrados a que se los miren de una determinada manera y a unas formas concretas de reaccionar ante su violencia verbal, sus chantajes morales y sus demandas. Cuando se encuentran con otro tipo de respuestas no violentas les descoloca, y si encima se ponen más agresivos y sigue sin haber espiral de violencia, la sorpresa es aún mayor.
El Educador de Calle será una persona que se implica y complica, porque: El proceso educativo es doble: no hay unos que ocasionan los problemas y otros que aportan soluciones. La aventura es iniciar juntos un recorrido en pos de respuestas por construir. Pero no se puede ver la realidad marginal infantil y juvenil con los ojos de adulto normalizado y menos utilizar técnicas o patrones provenientes del medio escolar. Por ello, el Educador, se va invistiendo a lo largo de su recorrido como tal de unas características que son inherentes a su tarea:- Debe actuar con prudencia.- Dispondrá de equilibrio personal.- Tendrá sentido de la responsabilidad.- Sabrá educar con humor y simpatía.- Trabaja para mejorar la vida en el barrio donde actúa.- No tiene un horario de trabajo laboral fijo.- Tiene que ser auténtico ante las personas, delante de los chavales.- Debe haber tomado una opción clara por los chavales.- No califica a los chavales.- Trabaja más por vocación que por profesión.- «Pasa» de la seguridad ciudadana, no es su tema. Para él lo más importante es el desarrollo integral del chaval.- Toma opción por el más débil.- Está integrado en el barrio, participando en las entidades ciudadanas.
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