Efemérides de la Mente – 23 de septiembre

Por Rgvecchio @rgvecchio

Muere en 1939 Sigmund Freud, psicoanalista austríaco padre del psicoanálisis, muy conocido por obras como La

Creador del psicoanálisis que revolucionó el campo de la psicoterapia a principios del siglo XX

Interpretación de los Sueños (1900) o Nuevas Lecciones Introductorias al Psicoanálisis (1933). Revolucionó con sus trabajos el campo de la psicoterpia. Enfatizó el rol del inconsciente sobre el funcionamiento racional, yendo contra corriente de la mayoría de sus contemporáneos al sugerir, por ejemplo, que los sueños y los lapsus también pueden ser comprendidos.Luchó contra el cáncer de mandíbula que sufrió desde 1923 hasta su muerte, luego de pasar por 16 operaciones. Había nacido un 6 de mayo de 1856.

Freud no inventó exactamente el concepto de mente consciente versus mente inconsciente, pero desde luego lo hizo popular. La mente consciente es todo aquello de lo que nos damos cuenta en un momento particular: las percepciones presentes, memorias, pensamientos, fantasías y sentimientos. Cuando trabajamos muy centrados en estos apartados es lo que Freud llamó preconsciente, algo que hoy llamaríamos “memoria disponible”: se refiere a todo aquello que somos capaces de recordar; aquellos recuerdos que no están disponibles en el momento, pero que somos capaces de traer a la cosnciencia. Actualmente, nadie tiene problemas con estas dos capas de la mente, aunque Freud sugirió que las mismas constituían solo pequeñas partes de la misma.

La parte más grande estaba formada por el inconsciente e incluía todas aquellas cosas que no son accesibles a nuestra consciencia, incluyendo muchas que se habían originado allí, tales como nuestros impulsos o instintos, así como otras que no podíamos tolerar en nuestra mente consciente, tales como las emociones asociadas a los traumas.

De acuerdo con Freud, el inconsciente es la fuente de nuestras motivaciones, ya sean simples deseos de comida o sexo, compulsiones neuróticas o los motivos de un artista o científico. Además, tenemos una tendencia a negar o resistir estas motivaciones de su percepción consciente, de manera que solo son observables de forma disfrazada.

Aunque a lo largo de su carrera Freud intentó encontrar patrones de represión entre sus pacientes que derivasen en un modelo general para la mente, observó que sus distintos pacientes reprimían hechos diferentes. Advirtió, además, que el proceso de la represión es en sí mismo un acto no consciente (es decir, no ocurriría a través de la intención de los pensamientos o sentimientos conscientes).

Freud buscó una explicación a la forma de operar de la mente. Propuso una estructura de la misma dividida en tres partes: el Ello, el Yo y el Superyó (véase Ello, Yo y Superyó):

El Ello representa las pulsiones o impulsos primigenios y constituye, según Freud, el motor del pensamiento y el comportamiento humano. Contiene nuestros deseos de gratificación más primitivos.

El Superyó, la parte que contrarresta al Ello, representa los pensamientos morales y éticos.

El Yo permanece entre ambos, mediando entre nuestras necesidades primitivas y nuestras creencias éticas y morales, el yo actúa. No es sinónimo de la consciencia (existen partes del yo que son inconscientes). Un Yo saludable proporciona la habilidad para adaptarse a la realidad e interactuar con el mundo exterior de una manera que represente el mejor compromiso entre los deseos y mociones pulsionales del Ello y las demandas restrictivas o punitivas provinientes del Superyó.

Interesado en la dinámica de estas tres partes de la mente. Argumentó que esa relación está influenciada por factores o energías innatos, que llamópulsiones.

Sostuvo que la libido madura en los individuos por medio del cambio de su objeto. Argumentó que la sexualidad infantil es “polimórficamente perversa”, en el sentido de que una gran variedad de objetos pueden ser una fuente de placer. Conforme las personas van desarrollándose, van fijándose sobre diferentes objetos específicos en distintas fases:

1. Fase oral, ejemplificada por el placer de los bebés en la lactancia.

2. Fase anal, ejemplificada por el placer de los niños al controlar sus esfínteres.

3. Fase fálica. Propuso entonces que llega un momento en que los niños pasan a una fase donde se fijan en el progenitor de sexo opuesto (complejo de Edipo) y desarrolló un modelo que explica la forma en que encaja este patrón en el desarrollo de la dinámica de la mente. Cada fase es una progresión hacia la madurez sexual, caracterizada por un fuerte Yo y la habilidad para retardar la necesidad de gratificaciones.

4. Período de latencia, período en que se desarrollan fuerzas psíquicas que inhiben el impulso sexual y reducen su dirección.

5. Fase genital, surge en la adolescencia cuando maduran los órganos genitales. Hay un surgimiento de los deseos sexuales y agresivos.

Es menos conocido el interés inicial de Freud por la neurología. En los comienzos de su carrera había investigado la parálisis cerebral. Publicó numerosos artículos médicos en este campo. También mostró que la enfermedad existía mucho antes de que otros investigadores de su tiempo tuvieran noticia de ella y la estudiaran

Desde el punto de vista de la medicina, la teoría y práctica freudiana han sido sustituidas por los descubrimientos empíricos a lo largo de los años. Lapsiquiatría y la psicología como ciencias rechazan hoy la mayor parte del trabajo de Freud. Sin embargo, muchas personas continúan aprendiendo y practicando el psicoanálisis freudiano tradicional. En el ámbito del psicoanálisis moderno, la palabra de Freud sigue ocupando un lugar determinante, aunque sus teorías aparecen reinterpretadas por autores como Sándor FerencziJacques LacanMelanie Klein y Wilfred Bion.

0.000000 0.000000