Con 10% de alcohol y una temperatura de servicio sobre los 8ºC-10ºC (para dejar que suba hasta los 12ºC), el corcho muestra ligero poso de cristal de bitartrato potásico, que en nada afecta ni a la calidad ni al sabor del vino. Éste tiene un primer aire de ligera turbidez y de claro carbónico. Es un vino que se irá aposentando con los años y que, aunque se pueda beber desde ya con gran placer, no hará más que crecer en botella en los próximos 5 años. Es chispeante casi, pero con gracia y armonía, Tiene la frescura y el aroma de la hierbaluisa y de la citronela. Agua del Sarre, se me ocurre escribir. Eau de Saar, vaya, porque es un vino de suave perfume (corteza de limón), goloso como el lemon curd. Fresco como un manantial de Elfos. Carne de membrillo con poco azúcar. Vino fugaz, lábil, que se escurre entre los labios pero deja el poso del gran arte efímero. Realmente terso y vibrante. Uno de los grandes Scharzhof de Müller que haya probado yo. Lo compré en Wein&Umami por 18€ (más IVA). (Ya puestos: si a alguno de Ustedes les interesa realmente la uva riesling -mi caso es el de un enamoramiento fuera de control-, no se pierdan, por favor, los Spätlese y Auslese 2010 de Egon Müller.)
Con 10% de alcohol y una temperatura de servicio sobre los 8ºC-10ºC (para dejar que suba hasta los 12ºC), el corcho muestra ligero poso de cristal de bitartrato potásico, que en nada afecta ni a la calidad ni al sabor del vino. Éste tiene un primer aire de ligera turbidez y de claro carbónico. Es un vino que se irá aposentando con los años y que, aunque se pueda beber desde ya con gran placer, no hará más que crecer en botella en los próximos 5 años. Es chispeante casi, pero con gracia y armonía, Tiene la frescura y el aroma de la hierbaluisa y de la citronela. Agua del Sarre, se me ocurre escribir. Eau de Saar, vaya, porque es un vino de suave perfume (corteza de limón), goloso como el lemon curd. Fresco como un manantial de Elfos. Carne de membrillo con poco azúcar. Vino fugaz, lábil, que se escurre entre los labios pero deja el poso del gran arte efímero. Realmente terso y vibrante. Uno de los grandes Scharzhof de Müller que haya probado yo. Lo compré en Wein&Umami por 18€ (más IVA). (Ya puestos: si a alguno de Ustedes les interesa realmente la uva riesling -mi caso es el de un enamoramiento fuera de control-, no se pierdan, por favor, los Spätlese y Auslese 2010 de Egon Müller.)