La tensión nerviosa también está relacionada con el “Síndrome de la Articulación Témporo Mandibular” (ATM), que consiste en acumular la tensión en los músculos que se encargan del movimiento de la mandíbula.
Liberando la tensión de la mandíbula puedes conseguir relajación y disminución de contracturas y dolores en cuello, espalda, cabeza u otros lugares, que parecen no tener nada que ver.
Los siguientes ejercicios sirven para tomar conciencia de la tensión que se acumula en la mandíbula y la boca, y para liberar esta tensión. Realice estos ejercicios lentamente, con movimientos pequeños y fáciles, con el mínimo esfuerzo posible, descansando cada cierto tiempo.
Sentado en una silla, bien apoyado en una posicion erecta y cómoda, apoyando los pies en el suelo, la espalda en el respaldar, las manos en los muslos.
1. Boca cerrada, sin apretar los dientes, lengua relajada, dejando cierto espacion en el interior de la boca, garganta suelta, labios juntos sin estar apretados. Permita que la boca se abra, y alcance con el mentón hacia adelante, buscando que los dientes inferiores estén ligeramente más adelantados que los superiores. Después deje que la mandíbula vuelva a la posición inicial y descanse. Observe como se siente o si percibe pequeños movimientos en el cuello y la lengua mientras mueve la boca.
2.Permita que la boca se abra y desplaza el menton de derecha a izquierda, de manera continua, sin forzar.
3. Deja que el menton vaya hacia atrás, con los dientes inferiores ligeramente detras de los superiores, dejando que el labio inferior se deslize detras del superior.
4. Abra la boca y cierre la boca muy lentamente. Relaje la cara, el cuello, la garganta y la lengua.