¿Qué significa este nuevo proyecto? La nueva reforma pretende reducir el número de años obligatorios de las carreras universitarias (pasar de cuatro años a tres años), y aumentar un año más el máster, que son los estudios posteriores al grado. Son estudios de especialización.
¿Qué sucederá con esta medida? El valor de los títulos disminuirá al necesitar de una especialización más completa que se ofrecerá mediante los másteres. Pero los estudios de especialización son mucho más caros que un curso universitario, con esto consiguen que solo aquellos que puedan pagar el master tengan mayores posibilidades de encontrar trabajo en un futuro.
De momento es un proyecto voluntariado y dependerá de las universidades aplicarlo o no. José Ignacio Wert, el ministro de educación, advierte que esta medida flexibilizará los grados y nos acercará y unirá más a Europa que desde un primer momento apostó por un proyecto similar al de 3 + 2. Además asegura que esto abaratará la educación superior, por una razón muy poco convincente. Según él afirma solo el 20% del alumnado universitario realiza los estudios de máster, por tanto, estas familias se ahorrarán un curso universitario. Aunque esto no soluciona el problema de que todos podamos acceder a los estudios. Además el precio de los másteres es bastante más caro que el de un curso universitario, entre 2.700 y 7.000 euros en comparación con unos 1.700 euros cada curso universitario. Por tanto no existe ningún abaratamiento de los estudios, sino un intento de aristocratizar los títulos de los másteres.
La fecha de inicio de implantación de esta medida no está clara, ni está acordada. Cataluña pretende iniciar este proyecto en el curso 2016-2017, en cambio, otras comunidades como Andalucía van a reunir al consejo de universidades para proponer que no se continúe con el proyecto.
9 países europeos de la categoría de Reino Unido u Holanda tienen el sistema universitario que el gobierno acaba de aprobar, y otros 9 países como Ucrania o Grecia tienen el sistema de grados de cuatro años. Según Wert este sistema nos ha alejado mucho de una internacionalización de la universidad y por ello atraemos a menos estudiantes universitarios.
En un principio las universidades privadas al no depender del Estado podrían no adaptarse a este sistema y realizar su educación de una manera libre. Pero al ser tramitados los títulos por el gobierno, es muy probable que lleguen a un acuerdo para establecer este proyecto tanto en universidades públicas como en universidades privadas. En la comunidad catalana ya han llegado a un acuerdo y las privadas se someterán al mismo régimen que las públicas.
Bibliografía:
El País
Eldiario.es