(22/02/2012, EFE)
Un 13 % de los polacos están a favor de que Polonia entre en la eurozona, un porcentaje sensiblemente inferior al 55 % de ciudadanos que rechazan la adopción del euro y que consideran que unirse a la moneda única no beneficiará a la economía de su país.
El porcentaje de polacos que hoy apoyarían una adhesión a la eurozona es considerablemente inferior al 32 % de ciudadanos que en marzo de 2011 respaldaban al euro.
La crisis económica que arrastran los países de la zona euro es la principal causa del rechazo de muchos polacos a la moneda única.
Polonia, fuera del euro y todavía sin planes concretos para su adopción, cerró el pasado 2011 con un crecimiento superior al 4 %, por encima de la media comunitaria, lo que justifica los argumentos de los escépticos frente a la moneda europea.
El jefe del Gobierno polaco, el liberal de centroderecha Donald Tusk, defiende la conveniencia de que Polonia se sume a la eurozona, aunque las últimas encuestas y la crisis que vive el euro han moderado ese entusiasmo.
“Mientras el euro sobreviva, los polacos mantendrán su compromiso de unirse a la moneda única”, decía Tusk semanas atrás.