El ajuste de riesgo ayuda a reducir la congestión de los servicios asistenciales y el gasto de la sanidad pública
Por FatEl refranero popular asegura que “más vale prevenir que curar”. Y en el sector sanitario, con la actual crisis económica, se aplica especialmente. En este sentido, y como preámbulo de las XXXII Jornadas de Economía de la Salud, que tendrán lugar en Bilbao del 16 al 18 de mayo, la Fundación BBVA ha celebrado durante esta jornada su XXII Taller titulado “El ajuste de riesgos, marco teórico y aplicaciones prácticas”. En él, los profesores Francesco Paolucci y Renata Hasanova, reconocidos investigadores en este campo, han expuesto en qué consiste este modelo, que emplean habitualmente las técnicas de ajuste de riesgos y modelos predictivos en sus trabajos de investigación científica, así como parte de su actividad docente en la Universidad Nacional de Australia.
Los profesores de la de la Universidad Nacional de Australia han explicado con detalle el desarrollo de los modelos de ajuste de riesgos aplicados en Australia, y cómo su implantación ha resultado ser en el país austral un método eficaz para asignar de manera eficiente los recursos sanitarios.
Ajustar el riesgo, reducir el gasto “Los modelos de ajuste de riesgo permiten predecir la frecuencia y el tipo de uso que hace determinada población de los servicios sanitarios”, asegura Manuel García Goñi, profesor de Economía Aplicada de la Universidad Complutense de Madrid. Teniendo en cuenta factores como el consumo y las morbilidades de la población, se puede establecer el riesgo potencial que tiene dicha población en hacer uso de los servicios sanitarios. “Con estos datos, se pueden ajustar los servicios asistenciales a las previsiones obtenidas, lo que sin duda permite a la sanidad pública ser más eficiente y reducir el gasto”, añade el profesor de Economía.
El Dr. Francesco Paolucci, profesor de economía en el Australian Centre for Economic Research on Health (ACERH) de la Australian National University (ANU), ha explicado durante su intervención los distintos modelos de ajuste de riesgos, su historia y sus experiencias internacionales. Hizo especial hincapié en los fundamentos de esta técnica y las experiencias llevadas a cabo por las distintas administraciones públicas australianas, así como en los requisitos que se deben cumplir para su adecuada implementación. “El uso de la información recogida para calcular la previsión de gastos sanitarios en un periodo determinado de tiempo (mensual, trimestral, anual, etc.) es fundamental para mejorar la eficiencia y la equidad de los subsidios y las pólizas sanitarias”, asegura el profesor Paolucci.
Factores de riesgo ¿Cómo medir el riesgo de la población? La Dra. Renata Hasanova, profesora en la Crawford School of Economics and Government, también de la ANU en Canberra, ha explicado la aplicación de este modelo en el Sistema Nacional de Salud de Australia, concretamente las del paquete estadístico STATA, y expuesto varios ejemplos adaptándolos a la situación de la sanidad pública vasca con datos del País Vasco.
La Dra. Hasanova ha expuesto un ejercicio práctico en el cual se ha estudiado el uso de los servicios sanitarios, teniendo en cuenta distintos factores a tener en cuenta a la hora de establecer el riesgo. “La información individualizada de la población, como edad, género y carga de morbilidad, nos permite evaluar el riesgo de la población”, concluye diciendo la experta.