Expertos británicos evaluaron diversas sustancias, incluyendo el alcohol, la cocaína, la heroína, el éxtasis y la marihuana, clasificándolas en base a qué tan destructivas son para el individuo que las consume y para la sociedad en general. Los investigadores analizaron qué tan adictiva es una droga y cómo daña al cuerpo humano y también incluyeron otros criterios, como el daño ambiental provocado por el narcótico, su papel en la desintegración familiar y sus costos económicos en cuidados médicos, servicios sociales y cárceles. La heroína, el crack y la metanfetamina, o metanfetamina de cristal, son las más letales para los individuos. Al considerar sus efectos sociales más amplios, el alcohol, la heroína y el crack se ubicaron como los más mortales. El alcohol superó en mortandad a todas las otras sustancias, seguido por la heroína y el crack. El alcohol se ubicó al frente de la tabla debido a la amplitud de su uso y a que tiene consecuencias devastadoras no sólo para los bebedores, sino también para los que los rodean. Cuando se ingiere en exceso, el alcohol daña casi todos los sistemas de órganos. También está vinculado con índices más elevados de fallecimientos y con un mayor porcentaje de delitos que la mayoría de las otras drogas, incluyendo la heroína. Este estudio fue financiado por el Centro de Estudios sobre el Delito y la Justicia de Gran Bretaña y publicado hoy en la revista médica The Lancet.