Así como los jugos de algunos cítricos, el apio y el perejil son plantas fotosensibilizantes, por lo que pueden causar fitofotodermatitis. Es decir, el contacto con estos alimentos, seguido de una exposición a la radiación solar causa una reacción cutánea.
El apio es extremadamente peligroso, causa quemaduras severas y estas en realidad son más comunes de lo que pueden imaginar las personas. Sin embargo, pocos están al tanto del peligro que oculta este alimento.
El apio y el perejil pueden causar lesiones rojizas en la piel, las cuales, dependiendo de la gravedad de la quemadura, pueden llegar a formar ampollas.
Lo recomendable es que al manipular el apio y el perejil se utilizen guantes y se evite en todo momento el contacto con la piel